Temor A La Muerte Ensayo
Autor: Julián Marías
Es menester introducir ahora en este estudio una cuestión sobre la cual no hay demasiada claridad, y que me parece esencial para la relación entre el amor y la pretensión de inmortalidad; pienso que aislados, aspectos decisivos de uno y otra quedan oscurecidos, mientras que su aproximación vierte luz sobre ambas dimensiones de la vida.
Por lo pronto, conviene distinguir dos cosas muy diferentes: se confunde a veces el temor a la muerte con el afán de inmortalidad, que son dos actitudes enteramente distintas y conducen a conductas que apenas tienen que ver.
El temor a la muerte no es privativo del hombre, lo comparte con muchos animales. El animal, en la medida en que se siente amenazado, se encuentra …ver más…
Pero hay algo más, ya no animal, sino puramente humano, y es la conciencia que el hombre tiene de la inevitabilidad de la muerte, aparte de toda situación de peligro actual. No sé si en algunos pueblos muy primitivos, con muy corta memoria y, un mínimo de imaginación, es así, pero ciertamente lo es en todas las formas humanas conocidas con un poco de precisión, es decir, desde dentro. El hombre sabe que morirá alguna vez, y que esto no se puede evitar, aunque no esté amenazado por ningún peligro y no sienta, por tanto, ese miedo actual.
Esto depende sobre todo de la imaginación. El hombre tiene una permanente proyección imaginativa, y traslada a la vida propia, la experiencia de la muerte ajena. Conoce la muerte de los demás-los ha visto morir o ha tenido referencias de su muerte- y esto le traslada a sí mismo, por lo menos a su vejez. Es decir, el que no tiene gran preocupación o un temor actual a la posibilidad de morir en cualquier momento, aloja la expectativa de la muerte en la vejez.
Esa es la actitud normal en el joven, que no cuenta mucho con la muerte – aunque piense en ella-, porque le parece algo abstracto. La actitud juvenil por excelencia es la de Don Juan Tenorio: “Para largo, me lo fiáis”. El joven piensa que morirá, pero dentro de muchos años, y no imagina quién es