1 Las cifras de una tragedia. Por Luis Javier Moreno Ortiz.
SUMARIO: 1. Liminar. 2. Un acercamiento a “lo social”. 3. El crecimiento. 4. La pobreza. 5. La desigualdad. 6. La multiplicación de las personas. 7. El capital humano. 8. La “bomba pensional” y la crisis fiscal.

Liminar. En una época en la que la especialización progresiva es insoslayable, es sorprendente encontrar un discurso accesible a los no iniciados en la liturgia epistemológica, que en no pocos casos revisten los textos económicos. Las piezas del rompecabezas 1 es un notable esfuerzo intelectual encaminado a superar los límites reducidos del círculo hermético de los 2 expertos . La complejidad creciente de la actualidad ha puesto en evidencia la precariedad de los …ver más…

Empero, el crecimiento, si bien parecería reducir la pobreza, no necesariamente modifica la distribución de esos bienes, en el sentido de mitigar las desigualdades. El crecimiento puede mantener las desigualdades al mismo tiempo que disminuye la pobreza 6 . La economía colombiana presenta un interesante crecimiento en el último siglo, visible, sin duda, en la reducción de la pobreza, pero la distribución no ha tenido una Esta mejoría equivalente 7 . situación no es exclusiva de Colombia, pues si bien la pobreza parece haber disminuido en el mundo 8 , aunque ahora sea más visible en razón del prodigioso progreso de las comunicaciones, la desigualdad parece mantenerse estable en su estado, e incluso con tendencia a empeorar 9 . La experiencia parece haber invalidado la hipótesis de (p. 14). 7 . (p. 19). 8 . (p. 31). 9 . (p. 28).
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. (p. 42). 4 . (p. 44). 5 . (p. 13).
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3 Kuznets 10 , según la cual el crecimiento, a largo plazo, resuelve por sí solo el problema de la desigualdad. Parece que en esta materia no existe tampoco esa mano invisible que pone todo en su lugar y hace que las cosas funcionen 11 . La práctica parece poner de presente la compleja posibilidad de que a medida que la pobreza disminuye es posible que la desigualdad aumente. Este panorama sería difícilmente comprensible si la riqueza consistiera meramente en la posesión de cosas, como todavía muchos se empeñan en creer. No obstante, la verdadera