Exportacion de madera
Cuando el viento no para de soplar
Carlos Schemmel
a ti, que junto a mi permaneces habiéndote ido amor hecho esperanza que nunca me abandona
COTUMBRES
Costumbre a espinas en rosas falta de piedad del tiempo olvido, deseo incomprendido recuerdo, niño sin sonrisa falta de esperanza vivir con prisa
la noche se abraza a mi alma de rodillas pide que no la abandone promete contar una misma historia mientras seca sus lágrimas desangrando heridas mi soledad y la noche se quedan dormidas
SILENCIO PROFUNDO
Lamento de ausencia herida incurable llaga insaciable que nunca aprendió a cerrar
corre silencio, corre profundo sangre desbocada de las venas segundos asesinos y traidores monotonía de penas …ver más…
rado fuego que se aleja brillo perenne torrencial franqueza
CARTA
Con sangre escribo tu carta sangre caliente de corazón el dolor nunca fue nada comparado con un adiós mi vida se va en palabras así lo he querido corazón sin suerte y valiente que tu has escupido
no tiene más que sangre hoy te la dedica porque te quiere, porque te ama porque te pierde ahora se derrama yo muero con el ya duele respirar ten por seguro que no se repetirá un amor de verdad
RETORNO
Volverá de la vida para estar a mi lado seguirá el viento hasta el lugar que tiene principio y fin mojará con sus lágrimas secará con sus suspiros
dirá adiós al llegar de un lugar anterior a la palabra arrancará el amor para puro clavarlo en mi corazón
desmembrará el odio quitando el alma de mi cuerpo una vez más con los ojos cerrados por dentro volverá a mi vida para estar a mi lado
BUSQUEDA
He escalado las grandes cimas para encontrar la imagen perdida he cruzado los inmensos desiertos escapando del espejismo ausente
he derrocado fabulosos titanes buscando en ello la muerte he cruzado los siete mares tratando de esparcir el tiempo
he visto mi desventurado destino alejando de mi ser toda esperanza he visto de frente a mis ojos enterrando mi alma en el abismo
DESENGAÑO
Ráfaga bella roja cual sangre esperanza y sueño encontrarte destronando la noche encandilada sin armadura
ojos profundos y brillantes mirada mortal dejarte retazos de estrellas al borde de un relámpago
tu espada yace en la tierra