Calaveras, Corridos Y Poesía.
El corrido es una forma musical y literaria popular del área cultural mestiza mexicana. Derivado a lo largo del siglo XVIII del Romance, entre otras formas populares traídas de Europa.
A continuación se presentarán diferentes ejemplos de lírica tradicional. Se podrán observar 10 diferentes corridos mexicanos:
Corrido 1:
Autor: Guillermo E. Hernández
Título: Corrido de “La Martina”
Quince años tenía Martina cuando su amor me entregó, a los dieciséis cumplidos una traición me jugó.
Y estaban en la conquista cuando el marido llegó:
-¡qué estás haciendo Martina, que no estás en tu color! -
-Aquí me he estado sentada, no me he podido dormir,
Si me tienes desconfianza no te separes de mí.-
-¿De …ver más…
Ocampo
Título: Corrido de “La Toma de Chilpancingo”. Nobles patriotas que en las montañas ven del pueblo la admiración, cuando escondidos en las cabañas se oye el feroz rugir del cañón.
Un hombre idiota de mala saña, que fue D. Luis Gral. Cartón, diría y cruel de malas entrañas todo pagaste en una ocasión.
Un pueblo culto, la heroica Cuautla que investigaba su falsedad, salvaje bajaste a Cuautla acostumbrado siempre a incendiar.
Que viva Huerta, muera Zapata, decían los Juanes sin vacilar, cuando justa, esa es la Patria y sus armas ha de ganar.
Fuiste sin duda tú para Huerta el hombre raro en esta ocasión y no pensabas que en la revuelta tú pagarías con tu batallón.
Pero Zapata que estaba alerta tirando siempre al usurpador, hasta que tuvo noticia cierta que al fin bajabas con gran valor.
Hubo una junta en San Pedro Hidalgo que varios jefes en esta vez, pues se marchaban con mucho agrado hacia otros puntos donde usted dirá.
Hay muchos jefes, varios soldados, que se encontraban con grande fe de prueba que el Colorado que por entonces era cuartel.
En Chilpancingo, según se dice, los generales eran un rey, también Cartón, Ponciano Benítez y el Gral. Juan Apoloncy.
Ellos soñaban que eran felices y resoplaban tanto que un güey, y los pelones echan de gises vengan bandidos a comer güey.
Así gritaban los pobres Juanes, sobre las casas de la ciudad, rompiendo el fuego todos iguales
Cartón gritaban con