El arte Post-moderno. Un proyecto…

«Lo postmoderno se presenta decididamente como lo antimoderno», cita el ya mítico filósofo Jürgen Habermas en su ensayo «La Modernidad. Un proyecto inconcluso». Un texto que su propia marcha, desde que el profesor alemán dictó este ensayo en la ciudad de Frankfurt, lo ha ido transformado en lectura obligada para los estudiosos de las ciencias humanísticas debido a su claridad sobre el tema «modernidad».

Su llegada al escenario filosófico contemporáneo lesionó varias ideas en el campo de la postmodernidad y dio lugar a una enriquecedora controversia que se ha extendido desde los años ochenta hasta este siglo que recién hecha a andar.

Sobre lo que sucede hoy con el término «modernidad» y …ver más…

Él la ELIGIÓ. Tomó un objeto de la vida diaria, lo reubicó de manera que se perdiera su sentido práctico, le dio un nuevo título y punto de vista y creó un nuevo significado para ese objeto».)

Y es precisamente en las significaciones de lo que es validado como arte en ambos períodos (modernidad y post-modernidad) que encontramos un pilar prodigiosamente esclarecedor para este debate. (Recordemos que el arte post-moderno simboliza la oposición, la «superación» a lo moderno. Mientras que la experimentación con nuevos modos de representar la luz y el espacio a través del color y la pintura, y de la vibración de la materia en el ámbito escultórico son las banderas de la modernidad, por su lado el pos-modernismo prefiere volver a métodos clásicos, a la continuidad de formas y estilos artísticos del pasado y fundando una mixtura estilística que acepte lo mismo el cómic que el graffiti)

Regresando un minuto sobre Habermas, razono saludable señalar que él mismo cita en su ensayo sobre el debate modernidad- post-modernidad que «el arte vanguardista (moderno, se refiere) ha logrado penetrar los valores de la vida cotidiana y ha contagiado el mundo de vida con los principios del modernismo. El modernismo es el gran seductor, pues por él el principio de autorrealización irrestricta, la exigencia de una auténtica experiencia personal y el subjetivismo de una sensibilidad sobre-excitada han llegado a dominar la vida».

Sin embargo, no deja de señalar –a título personal esta