resumen del piropo matematico
La maldición de los coches rojos.
En este primer capítulo te cuenta de la historia de la famosa probabilidad que se ve muy fácil pero igual es muy fácil equivocarte y de la estadística, con un interesante ejemplo del Periférico de la Ciudad de México, en que tratemos de pensar el número de choques que pasan. Nos dice en que podemos llegar de mil maneras al resultado, pero para poder sacar un promedio se necesitan de demasiada información.
Además nos presenta otro caso de probabilidad, donde todos hemos escuchado que los coches de color rojo son más propensos a choques, pero sabemos que no es posible saber hoy en día eso gracias a la mecánica cuántica porque contiene elementos irreducibles …ver más…
Varas, sombras y geometría.
En esta parte del libro verás cómo es impresionante como con una vara y el uso correcto de la geometría es posible de calcular hasta lo imaginable con ayuda de los ángulos rectos, suplementarios, opuestos entre otros. Como un ejemplo nos pone a Eratóstenes que fue uno del que predijo la circunferencia de la Tierra con ayuda de las simples varas y la geometría.
Leonardo y los conejos.
Leonardo de Pisa mejor conocido como Fibonacci fue un matemático especializado en la aritmética y en los sistemas de enumeración de su época. Por lo que en este capítulo nos habla de su libro más importante como el Liber Abaci, en ese libro se platean varios problemas y uno de esos es el de los conejos en el cual teníamos un pareja de conejos y podrán reproducirse cuando cumplan dos meses y a partir de esos dos meses tiene una pareja de conejo y así sucesivamente, entonces ¿cuántas parejas habrá al principio de cada mes? La respuesta se encuentra muy detallada en el libro
Astronomía, arquitectura y buen gusto: el efecto Chichen Itzá.
Aquí te darás cuenta que nuestros antepasados era muy sabios y no necesitaban computadoras como nosotros para saber cosas. Entonces ya sabemos que en el castillo de Chichen Itzá está construido con influencias toltecas y que en este se encuentra orientado de tal manera que, al ponerse el sol en los