¡Buenos dias princesa! libro completo
Hace dos años se conocieron cuando más se necesitaban y formaron el CLUB DE LOS INCOMPRENDIDOS. Sin embargo, algo ha cambiado y ahora ya no saben si pueden contar los unos con los otros.
Valeria no sabe si al dejarse llevar por lo que siente puede traicionar a su mejor amiga; Bruno escribe cartas de amor que no dan resultado; María es el patito feo que busca su sitio; Elísabet no está acostumbrada a que le digan que no;
Raúl no quiere equivocarse esta vez, y a Ester le gustaría gritar su amor a los cuatro vientos.
Amores desbordantes, dudas existenciales, secretos inconfesables y mucha, mucha diversión.
Únete al fenómeno BLUE JEANS, el autor de la trilogía
«Canciones para Paula», la primera novela que …ver más…
—¿Qué me das?, ¿un seis?
—Un ocho como mínimo.
Valeria contempla su rostro; un perfil, de frente, el otro perfil. Quizá Eli tenga razón. Es bastante monilla. Lo que pasa es que a su lado… Elísabet es todo un bellezón: pelo largo negrísimo, ojos verdes hipnotizadores, labios espectaculares, delgadita pero no escuálida… ¡Yuna noventa y cinco de pecho!
¡Y sin relleno! Ella apenas llega a la noventa.
Hacía un tiempo no era así. Las dos estaban, podría decirse, empatadas. En cambio, una dio un salto hacia delante espectacular y la otra, simplemente, no saltó. Eli es bastante más mujer que ella. Se la ve más madura, menos cría. Y los tíos piensan lo mismo. ¿Cuántos líos ha tenido a lo largo de los últimos meses?
Seis más que ella. Es decir, resultado de enero a noviembre de 2011: Elísabet, seis; Valeria, cero. Pero, en eso, y sólo en eso, no le importa demasiado que su amiga la gane. Ella está enamorada de alguien. De un chico, exclusivamente de un solo chico. Y para él se está guardando. En secreto. Porque ni su compañera de espejo sabe lo que siente.
—Tendré que salir vestida como he venido.
—Bueno, tu falda vaquera es bonita.
—Pero me gustaba tu pantalón de Stradivarius —comenta resoplando—.
¿Tú qué te vas a poner?
—El vestido negro.
—¿El ceñido?
—Sí. El ceñido.
¡No! ¡No! ¡No! Ese vestido le queda increíblemente perfecto. Todos la mirarán a ella. Bueno, últimamente, siempre la miran a ella. Sólo