Tren- Enrique Gil Gilbert
Enrique Gil Gilbert
Ellos los veían trabajar todos los días. Eran hombres venidos de la ciudad y gringos de sombrero
Ellos los veían trabajar todos los días. Eran hombres venidos de la ciudad y gringos de sombrero alón, pantalones de montar y pipa en la boca.
Iban a ver como trabajaban. Pasaban horas y más horas contemplando como rompían la tierra con sus picos o echaban cascajo encima del relleno para poner unos palos acostados.
-Es el tren que va a venir.
Explicaban.
De entre ellos algunos, que habían estado por arriba lo conocían.
Era un carro enorme que corría más duro que un perejero y parecía animal.
Arrastraba rabiatados una porción de carros. A veces gritaba “como chico llorón”. Cuando avanzaba sobre los rieles …ver más…
¡Qué preguntones!
Después, que qué no más tenía… Yo les dije que mi mujer y mis hijos y se rieron toditos…Entonces me digieron que qué animales y qué propiedás… Tube que decisles todito… ¡Se pusieron a hablar y habla que habla! Después di un ratísimo salieron dándome unos papeles y diciéndome que estaba despropiedao y que cobrar en la gobernación. Si yo no quiero vender les dije, por eso era lo que más mejor arroz me daba. Si es pa bien de ustedes me digieron i se fueron sin hacerme caso. Lo necesitamos, dijo un gringo y se jué dejándome con los papeles.
¡Gringos desgraciados! Abusan porque son gringos.
-Sí, compadre.
-Si viera lo trabajosísimo qué ser papel pa cobrá. Si hay que pagar un pilo e cosas pa podés cobrá.
-Así son cobran pa pagar.
-¿Y todo eso pa que venga unten con la sebilización?
-¿Y cómo será eso?
-Dende ahora que a mi no me gusta.
-Como ha empezado…
III
Pasó algún tiempo. Los trabajadores avanzaban. Las expropiaciones continuaban y el tren no venía.
Habían colocado las líneas. Al fin un día dijeron que ya iba a llegar.
-¡Ya viene! ¡Ya viene!
Salían todas las mañanas a mirar por si acaso viniera. Pero no venía. Un día…
Vinieron unos señores elegantemente vestidos, con un cura y bastantes señoras. Hubo fiesta.
-La inauguración- le explicaron.
-La