Resumen de hannah arendt
El hombre: animal, social o político
Cosas y hombres forman el medio ambiente de cada una de las actividades humanas, que serían inútiles sin esa situación; sin embargo este medio ambiente, el mundo en que hemos nacido, no existiría sin la actividad humana que lo produjo. Como en el caso de los objetos fabricados, que se ocupa de él, como en el caso de la tierra cultivada, que lo estableció mediante la organización o como el caso del cuerpo político.
Ninguna clase de vida humana, ni siquiera la de ermitaño en la agreste naturaleza, resulta posible sin un mundo que directa o indirectamente testifica la prescencia de otros seres humanos.
Todas las actividades humanas están condicionadas por el hecho de que los …ver más…
El rasgo distintivo de la esfera doméstica era que en dicha esfera los hombres vivían juntos llevados por sus necesidades y exigencias. La esfera de la polis, por el contrario, era la de la libertad, y existía una relación entre estas dos esferas, ya que resultaba lógico que el dominio de las necesidades vitales de la familia fuera la condición para la libertad de la polis. Bajo ninguna circunstancia podía ser la política sólo un medio distintivo a proteger a la sociedad.
Lo que dieron por sentado los filósofos griegos, fuera cual fuera su oposición a la vida de la polis, es que la libertad se localiza exclusivamente en la esfera política.
Ser libre significaba no estar sometido a la necesidad de la vida ni bajo el manto de alguien y no mandar sobre nadie, es decir, ni gobernar ni ser gobernado.
En el Mundo Moderno, las esferas social y política están mucho menos diferenciadas. Que la política no es más que una función de la sociedad, que acción, discurso y son fundamentalmente superestructuras relativas al interés social.
Con la aparición de la esfera social y/o de las actividades económicas a la esfera pública, todas las materias que anteriormente pertenecían a la esfera privada-familiar se han convertido en interés “colectivo”. En el Mundo Moderno, las dos esferas fluyen de manera constante una sobre otra.
El concepto medieval del “bien común”, lejos de señalar la existencia de una esfera política, sólo reconoce