¿Consecuencias de los malos hábitos alimenticios?
Obesidad, sobrepeso, taquicardias, nauseas, hinchazón, diarreas o constipación, dolores de cabeza o musculares, debilidad, cansancio, depende de si sea mal habito por no comer, saltear comidas o comer malcomida chatarra.
Pero esos son las consecuencias. Nunca es bueno tener malos hábitos alimenticios. A la larga o a la corta aparecerán los problemas. si es obesidad o aun riesgo de sobrepeso, puede aparecer diabetes, hipertensión, colesterol, y muchas cosas más, a veces la persona está en el peso correcto, pero hay un abuso o mejor dicho preponderancia de los hidratos, entonces puede derivar en diabetes 2,con el exceso de chatarra ni hablar, de las gaseosas, del alcohol, son muchas los …ver más…

- El desarrollo de diabetes mellitus, enfermedad incurable y muy grave.
- Hipertensión arterial.
- Altos niveles de colesterol en sangre que son un factor de riesgo para infartos y problemas cardiacos y vasculares.
- El sentirse marginados puede llevarlos también a desarrollar adicciones, como una forma de evadir el problema que tienen.
- Apnea y otro tipo de alteraciones del sueño.
- Madurez sexual prematura, ya que las niñas obesas pueden entrar a su pubertad antes de tiempo y tener ciclos menstruales irregulares.
- Problemas en la piel.
Cuando la obesidad se manifiesta en la infancia, persiste en la adolescencia y no se trata a tiempo, probablemente se arrastrará hasta la edad adulta en donde en el caso de las mujeres será un riesgo adicional para los embarazos.

En la alimentación no sólo entran en juego una combinación específica de ingredientes o una forma particular de cocinarlos; más allá de ello también están presentes una serie de factores biológicos, sociales y culturales que se combinan para dar lugar a los hábitos alimenticios de cada grupo humano.
La religión es uno de estos aspectos. El sistema de creencias y valores de cada cultura determina en buena medida el tipo de alimentos que comemos, así como las categorías con las que nos referimos a la comida: saludable, dañina, conveniente, festiva, ordinaria, sagrada o profana. A través de estas clasificaciones cada pueblo determina qué alimentos son