Monólogo Interno
Libro: Ensayo sobre la ceguera de José Saramago
(La esposa se encuentra acostada con su esposo a punto de dormir)
-Buenas noches amor descansa, mañana veremos cómo amanece esta situación–Buenas noches querida(le contesta su esposo), -que suerte tiene, a veces me digo a mi misma, que suerte tiene de no poder ver lo mismo que veo yo, se que debería de valorar el hecho de que no perdí la vista como los demás ciegos pero a veces me siento muy mal siendo la única, veo a la gente sucia, enferma y muriéndose de hambre, y yo, para no causar un alboroto dentro del lugar me quedo callada sin decir que puedo ver. Es muy triste todo lo que veo, todos esos cadáveres que hay que enterrar en el patio …ver más…
Yo no puedo decir nada, si digo algo sobre esos soldados de seguro causaría un conflicto horrible, si de por si hay desconfianza no quiero imaginarme el caos que se desataría por mi culpa, apuesto que mi esposo no desearía que me metiera en ningún conflicto que pudiera arriesgar nuestra estancia en este horrible lugar. Es muy tarde y no puedo dejar de pensar ni un minuto sobre esta situación, ojala fuera un sueño y cuando me duerma me gustaría despertar y ver que todo fue mentira, amanecer en mi cama a lado de mi esposo en nuestra casa, daría lo que fuera porque esto no fuera realidad. ¿Qué estará pensando esa chica de las gafas?, de seguro era una persona muy vanidosa, a pesar de que no ve sigue poniéndose esas gotas para los ojos, si al menos pudiera decirle lo bonita que se ve ahora que su enfermedad se le está quitando, pero no puedo, que desesperación me siento como una traidora, no puedo decirle a nadie que puedo ver, debería estar afuera en un laboratorio para que me hagan estudios y ayudar a encontrar una cura para la ceguera, pero como están las cosas, sería incapaz de dejar a mi esposo aquí solo sabiendo como los tratan, hace días que no mandan una buena porción de alimento, todos nos estamos muriendo de hambre. No me puedo sacar de la cabeza la imagen de las personas muertas del otro día, los demás