Los dueños del cuarto poder. francisco vidal
Es un proceso infeccioso del parénquima pulmonar. Como resultado, se produce una disminución de la superficie del intercambio gaseoso, debido a la ocupación realizada por la infección. Son procesos inflamatorios agudos, caracterizados por un infiltrado exudativo y celular en los alveolos, el intersticio y los bronquiolos respiratorios.
La neumonía hace que el tejido que forma los pulmones se vea enrojecido, hinchado y se torne doloroso
SINTOMAS
Los siguientes síntomas pueden estar relacionados con la enfermedad: o Generalmente, es precedida por una enfermedad como la gripe o el catarro común. o Fiebre prolongada por más de tres días, en particular si es elevada. o La frecuencia respiratoria aumentada: recién nacidos …ver más…
o El paciente infantil tiene la piel fría, tose intensamente, parece decaído, apenas puede llorar y puede tener convulsiones, se pone morado cuando tose, no quiere comer (afagia), apenas reacciona a los estímulos. El cuadro clínico es similar en el paciente adulto. o En adultos sobre 65 años es probable una manifestación sintomática muchísimo más sutil que la encontrada en personas jóvenes.
TRATAMIENTO
Las neumonías bacterianas se tratan con antibióticos. Existen muchos tipos de antibióticos y su elección depende del germen que se sospecha causa la enfermedad, la gravedad de la neumonía y las características del enfermo. Si existen factores de gravedad debe hacerse un ingreso hospitalario e iniciar tratamiento intravenoso con antibióticos y otros fármacos.
Neumonía vírica: Se recomienda administrar aciclovir para las infecciones pulmonares por virus herpes simple, herpes zóster o varicela.
Los fármacos de elección es trimetoprima-sulfametoxazol. Los principales efectos secundarios son exantemas cutáneos, neutropenia y fiebre. Los regímenes alternativos incluyen pentamidina, atovacuona o clindamicina. Todos los tratamientos deben durar al menos 21 días.
Son eficaces la tetracilina o la doxiciclina, eritromicina, la claritromicina y la azitromicina. Los alternativos son amoxicilina, fluoroquinolonas
La fiebre y otros síntomas se suelen controlar en 48 a 72 horas, pero es preciso mantener el tratamiento