Legados y fideicomiso
En las cartas impuestas al Heredero en el Derecho Romano establece que la institución del heredero es la parte esencial del testamento, pero pueden encontrarse en él otras disposiciones. Como la desheredación y la dación de un tutor.
En el testamento se hallan casi siempre cargas impuestas al heredero, estas cargas pueden estar inscritas en forma de una orden inperative (legado), en forma de ruego precautivo modo (fideicomiso). Estas dos clases de cargas estaban separadas por diferencias bastante numerosas. Los fideicomisos obedecían en general, a principios menos rigurosos.
Pero, Justiniano realizo la fusión de los fideicomisos y los legados, por una constitución del año 531. Para dar mayor efecto a la …ver más…
Lo sometió a un control jurisdiccional de los cónsules, que pronto fue transferido a unos pretores especiales para las causas fideicomisarias pero su conversión en institución jurídica acabaría por confundirla, en parte, con los legados, de tal suerte que los Fideicomisos de simple disposición directa de bienes singulares acabaron por perder su nombre confundidos con los legados que cumplían el mismo fin, y el término «Fideicomiso» sólo subsistió para designar las substituciones fideicomisarias, pues el fin de estos no resultaba alcanzable con la forma de los legados.
Ahora bien, el Fideicomiso subsistió mientras hubo esclavitud, y esto, como modo de dar indirectamente la libertad a los esclavos, es decir como encargo de dar tal libertad.
Las substituciones fideicomisarias fueron abolidas por la Revolución Francesa y se obvió en el Código Napoleónico.
La fiducia tuvo su origen jurídico en el Derecho romano clásico, mediante acciones asimiladas a las de buena fe, la «actio fiduciae», mas el negocio se limitaba a un grupo muy reducido de cosas (inmuebles, los esclavos y los animales de rito y carga) vale decir los res mancipii, de tal manera que cuando desapareció la especialidad de esas cosas objeto de mancipación en el Derecho romano posclásico, la fiduciaria careció de objeto y por eso quedó abolida por Justiniano, como quedaron abolidos los Fideicomisos por la Revolución Francesa.
Los romanos no llamaban fiduciario a la persona