- Resumen
- Educación y desarrollo en
el esquema de las sociedades capitalistas desarrolladas y
subdesarrolladas - El problema de los
valores - La escuela
tradicional - La escuela
nueva - La escuela
progresista - Educación, desarrollo
y nuevas tecnologías - Educación y
democracia - Educación superior y
desarrollo - Bibliografía
La investigación que se muestra a
continuación, aborda el comportamiento
de la
educación en la sociedad contemporánea,
así como las exigencias que se le presentan en los inicios
del tercer milenio, como uno de los elementos que ha adquirido
mayor relevancia social, política y
económica en el mundo. También se integran los
elementos de la educación y el desarrollo, las nuevas
tecnologías y su impacto educacional, la
relación de la educación con la democracia,
así como elementos de la educación
superior.
Los sistemas
educativos en la actualidad, han de responder con sentido
prospectivo a las características que han adoptado los
escenarios del mundo globalizado; para lo cual se deberán
diseñar estrategias que
no solo se adapten a esos cambios, sino que se anticipen a las
expectativas o contribuyan a crearlas
Descriptores.
sociedad contemporánea, relevancia social
política y económica en el mundo, sistema
educacional, prospectivo.
Title: Education and its development in the
context of Contemporary Society.
Abstract: The investigation that fallows includes
the behaviour of education in contemporary society, as well as
the requirements that take place in the start of the third
millennium, as one of the elements that have acquired the
uppermost social, political and economical relevance in the
world. Besides, we also have the elements of education and
development, the new technologies and their educational impact,
the relationship between education and democracy, plus the
elements of the universitary education and democracy, plus the
elements of the universitary education.
The current educational systems should respond with a
prospective sense to the characteristics, taken by the globalized
world scenes; so, some strategies should be designed, not only to
be suitable for these changes, but also to anticipate and
contribute in the creation of expectations.
Descriptors:
contemporary society, uppermost social, political and
economical relevance in the world, educational systems,
prospective.
En los inicios del tercer milenio uno de los elementos
que ha adquirido mayor relevancia social, política y
económica, es lo referente a la educación. El
análisis del proceso
educativo trasciende los límites de
la escuela por su
orientación temporal que rebasa los límites de una
edad determinada en los sujetos que aprenden. Otro punto de
análisis se refiere al desarrollo de capacidades
individuales para el desenvolvimiento de los hombres como seres
sociales. El tercer punto a debatir y en el que centraremos la
atención, lo constituye la relación
entre educación y desarrollo, abarcando los planos
económicos, político y social.
Los sistemas educativos en la actualidad, han de
responder con sentido prospectivo a las características
que han adoptado los escenarios del mundo globalizado; para lo
cual se deberán diseñar estrategias que no solo se
adapten a esos cambios, sino que se anticipen a las expectativas
o contribuyan a crearlas.
II. DESARROLLO
Educación y
desarrollo en el esquema de las sociedades
capitalistas desarrolladas y subdesarrolladas.
Las relaciones entre educación y desarrollo
tienen sus bases en la creciente necesidad de los sistemas
económicos de impulsar el empleo y la
introducción nuevas formas de
obtención de ganancias y de hacer eficiente los procesos
productivos.
En sentido inverso, los sistemas educativos siempre
tratarán de conducir sus prácticas, en función de
cumplir las exigencias impuestas por dichos sistemas
económicos.
El análisis de la relación existente entre
educación y desarrollo permite reconocer el carácter interdependiente de estos procesos
en la sociedad contemporánea. Se manifiesta también
la existencia de un paralelismo entre la
organización empresarial y de los servicios con
los sistema educativos, con lo cual se justifican las
desigualdades en las formas de distribución de las riquezas, el control del
acceso a los puestos de dirección y a los empleos.
La educación como fenómeno social debe ser
dirigida y orientada por el estado. Su
desarrollo en América
Latina ha estado marcada
por la introducción de orientaciones que han evolucionado
desde posiciones donde el estado ejerce un total control de las
prácticas educativas, en función de todos los
sectores que componen la sociedad.
En nuestra región las políticas
de desarrollo promovidas por la CEPAL y los organismos
financieros internacionales a lo largo de la segunda mitad del
pasado siglo dirigen su atención fundamentalmente a la
necesidad de una inversión cada vez mayor en la
educación como vía para alcanzar el desarrollo. Un
ejemplo de estas propuestas se esboza a partir de la a teoría
del capital humano
que concibe la relación entre educación y
desarrollo en dos vertientes fundamentales; la primera plantea
que una inversión personal en la
educación promoverá mayores niveles de ingreso y
una movilidad social ascendente. La segunda variante de
análisis argumenta la necesidad de una inversión
económica que abarque a todos los entes sociales como
vía para promover el desarrollo económico del
país, sin embargo los datos que a
continuación se presentan ilustran una realidad
diferente.
El incremento de la desigualdad en forma de
exclusión social influyó negativamente en el
desarrollo de los programas
educativos en los ‘80 y en los ‘90. De 1980 a 1990
los latinoamericanos por debajo de la línea de pobreza se
incrementaron de 37% a 39% en el caso de la pobreza
urbana, y del 25% al 34% en el caso de la rural. En 1970 la
brecha entre el 1% más pobre y el 1% más rico de la
población latinoamericana era de 363 veces,
en 1995 aumentó a 417. Según el BID, en los
‘90 se ha producido una extensión de la pobreza a
más de 150 millones de latinoamericanos, que equivale a
cerca del 33% de la población que percibe menos de dos
dólares diarios, mínimo necesario para cubrir las
necesidades básicas de consumo.
En 1998, pese a que el PIB
creció en un 2,6%, la desocupación en la región
aumentó de 7,2% a 8,4%. Junto a esto se observa un
decrecimiento de los empleos en el sector formal y el hecho de
que en el período 1990-1997 de cada 10 empleos que se
crean, 9 de ellos pertenecen al sector informal. CEPAL, en su
Panorama Social de América
Latina 2000, estima que la población en condiciones de
pobreza creció de 204 millones en 1997 a 220 millones en
el 2000. En América Latina hoy el 5% de la
población es dueña del 25% del ingreso nacional,
mientras que el 30% sólo tiene el 5% del ingreso
nacional.
La no inversión en la educación en los
‘80 obedeció a la incertidumbre en cuanto a la tasa
de retorno futuro de esa inversión y a otros factores. A
pesar de un ligero incremento en la inversión en la
última década, el Nuevo Modelo
Económico (NME) que cristalizó en los ‘90 ha
resultado ser un límite a la potencialidad democratizadora
que implican las transformaciones educativas.
Pese al incremento de la inversión educativa en
los ‘90, esta sigue siendo muy baja. Los países de
la OCDE invierten per cápita 8 veces más que los
países latinoamericanos en educación. En nuestra
región el gasto anual por alumno por nivel de
educación en 1992 fue de $ 252 dólares, 394 y 1485
respectivamente en las enseñanzas preescolar y
primario, secundario y superior, mientras que en los de la OCDE
estas cifras fueron de 4.170, 5.170 y 10.030.
En los países desarrollados el gasto
público en investigación y desarrollo como %
del PIB oscila entre el 3,0% en el caso de Japón y
el 2,5% aproximadamente en otros países; mientras que en
América Latina (salvo en los casos de Cuba y
Costa Rica,
que están en el orden del 1,26% y el 1,25%) no alcanza al
1%. Si en la región no se invierte al menos del 5% al 7%
del PIB en educación (educación básica y
media y educación superior) y no menos de un 3% en I+D,
será difícil cerrar la brecha que se ensancha con
respecto a los países desarrollados. Es obvio que estas
cifras deben ajustarse a las peculiaridades de cada
país.
La postura neoliberal impuesta, tanto a países
desarrollados como subdesarrollados, ha repercutido directamente
en las condiciones de desarrollo y en los sistemas educativos. La
forma que preconizan los principales centros de poder mundial
ha estado encaminada a idealizar los mecanismos a través
de los cuales, la educación se dirige a potenciar el
desarrollo. "la propuesta escolar neoliberal tiene en cuenta los
derechos de las
familias y los consumidores en el campo educativo, pero subrayan
más que nada los aspectos de la libertad
individual y los mecanismos de progreso y desarrollo."
Esta tendencia ha tenido un profundo impacto en los
sistemas educativos de América Latina y el Caribe, tanto
en las dos últimas décadas del siglo pasado, como
en lo que va del presente siglo XXI.
La propuesta de globalización neoliberal promueve una
descentralización desmedida de la
función educativa del estado, relegando la misma a las
prácticas escolares de instituciones
privadas y las formas no escolarizadas de educación. Esta
situación, en términos de desarrollo ha significado
la acentuación de la situación de subdesarrollo,
la dependencia, subordinación y monoproducción de
los países latinoamericanos; profundizando la
disminución de la calidad de
vida en general, el aumento cuantitativo de la pobreza y la
imposición de un pensamiento
único.
Entre los elementos que reflejan las influencias
educativas, de esa concepción que combina la ideología de mercado con
prácticas propias del mundo de los negocios, y de
la obtención de ganancias como objetivo
esencial, se encuentran, la permanente competencia entre
los profesores y los contenidos educativos, la
introducción de redes electrónicas
para el aprendizaje,
la traducción y el adecuamiento de los
principales aportes de las ciencias, la
modificación de la gestión
de las instituciones en un sentido menos jerárquico y
formal, las políticas públicas y el mutuo
enriquecimiento entre distintas modalidades de educación
(pública-privada) y entre diferentes instituciones
educativas (formal, informal y a distancia).
El currículo se torna crecientemente complejo
y la educación, en especial la superior, debe entrenar a
los estudiantes en el manejo de las nuevas tecnologías y
de varios idiomas. Por otra parte, se tiende a exigir cada vez
más la rendición de cuentas acerca
del manejo de los recursos y de los
resultados alcanzados con relación a objetivos
predefinidos.
La virtualización de la educación tiende a
desarrollarse vertiginosamente con el objetivo de expandir la
educación a un menor costo, vía
la educación a
distancia. Internet tenderá a
convertirse en la forma predominante de educación y en
especial de educación superior.
Los mismos líderes y responsables de las
políticas neoliberales y de sus consecuencias, reconocen
que es necesario atenuar estas políticas por sus
consecuencias desastrosas para el "Estado de Bienestar" del Norte
y para el "Estado de Malestar" que siempre ha prevalecido en el
sur.
El problema de
los
valores.
Para el análisis de la problemática de los
valores y su
proyección en el contexto de la educación es
preciso que se tenga en cuenta qué referente se
asumirá del concepto
"valor", debido
fundamentalmente a que las prácticas educativas responden,
como hemos visto anteriormente a un sistema
político determinado que es quien rige y dicta el
sistema de valores a ser trabajado en el marco de las
escuelas.
Teniendo en cuenta estos elementos encontraremos que el
valor "consumo" es enfocado como valor por las sociedades
capitalistas y como antivalor por las sociedades de
orientación socialista. En este trabajo
entendemos por valor "la significación socialmente
positiva que tienen los objetos y fenómenos de la realidad
para el
hombre."
En el campo educativo las distintas orientaciones
pedagógicas han enfocado el tratamiento a los valores
desde la óptica
del sistema teórico que la sustenta, presentándose
tres variantes organizativas que son las que más relieve han
adquirido en la dirección del aprendizaje de
los alumnos. Algunas de las características que definen
estos enfoques son:
- La tendencia axiológica es el objetivismo
axiológico, al aparecer como entes en sí,
esenciales y objetivos, independiente de los bienes y de
los sujetos que los valoran. - Valoración de la enseñanza humanística y de la
cultura
general y el
conocimiento ya constituido. - Valorización de la organización lógica de la enseñanza (centrada
en el profesor y
de manera externa en el alumno, con una programación lógica de las
disciplinas. - Valoración de la disciplina
escolar como una vía de acceso a los valores esenciales
del conocimiento. (poder moral que
lleva a una realidad moral)
- Esta propuesta pedagógica está centrada
en el individuo,
valorizando sus características, necesidades y
actividades personales, lo cual significa un subjetivismo
axiológico, ligando indisolublemente valor y
valoración. - Valorización de la enseñanza real, la
vida y las actividades humanas. - Valoración de la iniciativa personal, la
actividad libre y la autonomía del alumno. - Valorización de una reforma pedagógica
en detrimento de los contenidos de la
enseñanza. - Valorización del alumno como centro del
proceso de aprendizaje.
- La tendencia axiológica es aquella que
deviene en reflexiones instauradas a partir del materialismo
histórico y dialéctico. - Valorización de los contenidos y los
modelos
educativos actualizados, vinculados al mundo del alumno con
un valor socialmente significativo. - Valorización de la escuela como agencia
difusora de contenidos vivos, concretos, indisolubles de la
realidad social. - Valoración de una relación
educación–sociedad crítica por un contenido
histórico y político, logrando una
comprensión más profunda y organizada de la
realidad.
Educación, desarrollo y nuevas
tecnologías.
El mundo contemporáneo está marcado por
los efectos de una profunda revolución
tecnológica: la llamada Revolución
Electrónico/informática, que se traduce en cambios en
las telecomunicaciones, la microbiología y otras
áreas.
Sea cual fuere la interpretación de la magnitud de los
cambios que hoy está sufriendo el mundo, no cabe dudas de
que el impacto de la más reciente revolución
científico–tecnológica, en el terreno social,
político y cultural es enorme. Uno de los blancos en el
cual ha hecho impacto esta nueva revolución
científica es en la educación.
El término sociedad del conocimiento es un
concepto útil para describir el paso de una sociedad
fundada en la producción de bienes materiales a
una sociedad de la era de la información, donde el tratamiento, almacenamiento,
intercambio y producción de nuevos conocimientos
predominarán. La nueva orientación producida a
partir de la introducción de las nuevas tecnologías
privilegia el trabajo
colectivo, el aprender en grupo, la
integración de conocimientos, el
énfasis en el aprendizaje más que en la
enseñanza, el desarrollo de capacidades para reflexionar,
problematizar, integrar, clasificar, comparar y para trabajar en
equipos multidisciplinarios.
Un aspecto polémico y controvertido entre quienes
vienen trabajando este tema resulta a la sugerencia de la
posibilidad de ampliar las formas de acceder al conocimiento al
minimizar las limitaciones relativas a espacio, tiempo,
infraestructura, personal docente y por otra lado lo relacionado
a las formas que ha asumido la
globalización y su maridaje con la propuesta
neoliberal donde se profundizan los procesos de exclusión
y segmentación.
Estas nuevas formas de producir, trasmitir y organizar
el conocimiento requieren de instituciones educativas con
autonomía, abiertas a las nuevas del conocimientos y a
políticas que faciliten "accesos libres y gratuitos a la
mayor parte de servicios relacionados con la búsqueda del
conocimiento"
La educación del hombre no solo
contempla la dimensión económica, el tener,
producir y consumir; educar es también generar vida. Este
último aspecto de la educación se presenta como
alternativa democrática que pretende enfrentarse a la
práctica neoliberal, esta última, generadora de
desigualdades, exclusión y falsa democracia.
Si unimos, en un mismo contexto de reflexión, las
palabras educación y democracia y si asumimos una
posición crítica y cuestionadora de los ideales
prometidos por el neoliberalismo, estaremos reconociendo la
imposible neutralidad política de la escuela y su
función de inclusión social y como proceso de
ruptura con la pasividad y la omisión
política.
Un elemento necesario a tener en cuenta para entender la
relación entre educación y democracia es la
cuestión de la universalización de la
enseñanza, lo que implica el acceso al sistema escolar de
forma gratuita, como derecho amplio y fundamental de todos los
ciudadanos. La posición adoptada en América Latina
y el Caribe, reconoce que "no hay desenvolvimiento sustentable
sin paz ni desenvolvimiento sin democracia, y nada de esto
podremos alcanzar sin asegurar el derecho de los niños a
una educación de calidad para
todos."
Posibilitar el acceso a la educación
básica es una meta permanente de toda sociedad que se
pretenda democrática. No obstante el acceso puede ser
también instrumento de manipulación, la escuela es
capaz de promover tanto ciudadanos libres como ciudadanos
adaptados. "La alternativa viable ante el neoliberalismo debe
potenciar en el individuo, al máximo posible, sus
potencialidades de pensar, de hacer y de ser. Contribuyendo con
la riqueza de su singularidad al equilibrio,
bienestar y progreso del colectivo donde vive."
Educación superior y
desarrollo.
La universidad es a
la vez uno de los motores del
desarrollo económico y uno de los polos de la
educación a lo largo de la vida, es a la vez depositaria y
creadora de conocimientos y técnicas.
En las universidades se agrupan el conjunto de las funciones
tradicionales asociadas al progreso y a la trasmisión del
saber: investigación, innovación, enseñanza,
formación, educación permanente y la
cooperación internacional.
El modelo neoliberal, en lo que a las universidades se
refiere, implica que la universidad contrata con el Estado, con
las empresas y con
los padres de familia que
tienen capacidad de pagar la educación de sus hijos. Todos
exigen niveles de excelencia en conocimientos y saberes
útiles a los mercados, y
procuran no rebasar la demanda con
sobreofertas de egresados que abatirían los sueldos y
empleos. Esta nueva universidad neoliberal tiene una
política llamada "humanitaria" mediante la cual
fundaciones públicas o privadas ofrecen becas o créditos a los estudiantes pobres que no
pueden costearse sus estudios. "Si el concepto de universidad
neoliberal pone el acento en lo público y en lo privado,
el concepto de capitalismo
universitario destaca la transformación de las actividades
universitarias en mercancías".
Se piensa en términos de mercado y esto conduce a
la creación de las universidades corporativas, en
función de las necesidades de las corporaciones, como fue
el caso pionero (1950) de la General Motors para recuperar el
carácter de proyecto
democrático de la educación. Esta propuesta es
incompatible con el proyecto, "Educación y conocimiento,
eje de la transformación productiva con equidad"
(CEPAL-UNESCO, 1992).
Dentro de las funciones principales que en el
ámbito latinoamericano se le asignan a la educación
superior con una orientación neoliberal se
encuentra:
Lograr que la humanidad pueda dirigir cabalmente su
propio desarrollo, haciendo que cada persona se
responsabilice de su destino a fin de contribuir al progreso de
la sociedad en la que vive, fundando el desarrollo en la
participación responsable de las personas y de las
comunidades en la perspectiva de la educación permanente,
en la que la educación básica deberá dar a
cada persona los medios de
modelas libremente su vida y participar en la evolución de la sociedad.
Esta orientación se dirige a eliminar la responsabilidad estatal de fomentar la
educación y de garantizar el acceso de los sectores
más vulnerables y de menores ingresos.
Una segunda función tiene que ver con el hecho de
establecer entre los individuos vínculos sociales
procedentes de referencias comunes. Para que cada persona pueda
conocer el mundo social y ayudar a su construcción, tiene primero que conocerse y
comprenderse a sí mismo.
Otra de las tareas predominantes en la educación
superior lo constituye acompañar el avance de la ciencia y
de la tecnología, pues es la escuela, y
principalmente la universidad , el lugar donde la ciencia crece,
se renueva y difunde.
La cuarta función está relacionada con la
necesidad de que la educación llegue cada vez a más
personas. Así la educación de adultos y las formas
no presenciales cobran mayor relevancia.
En este ambiente no
siempre se han podido cumplir estas metas:
La creciente complejidad de los sistemas de
Educación Superior –su masividad, el vertiginoso
crecimiento del sector privado, el carácter de variable
clave para el desarrollo de las naciones y sus limitaciones con
relación a la sociedad de la información y el
conocimiento– han llevado a los gobiernos a abandonar la
posición de laissez faire propia de la
década de los ‘80 (en la que la privatización era considerada un paliativo
a la expansión cuantitativa, sin que se controlase la
calidad) y a adoptar una nueva actitud con la
formulación de políticas que velen por la calidad
mediante la certificación y la evaluación, con el objetivo de conciliar
expansión y calidad, sin interrumpir el proceso de
desarrollo de las IES privadas, pero sí formulando
políticas y confeccionando instrumentos para su
control.
En este cambio de los
gobiernos mucho han influido los documentos y
conferencias de UNESCO. Ejemplo de esto lo tenemos en la
creación de Comisiones Nacionales en varios países
–Argentina (CONEAU), México
CONAEVA) – que, sin limitar la autonomía corporativa
de las universidades, las someten a la verificación y
control de pares académicos. Otros ejemplos son los
procesos de evaluación conducidos en la Universidad de la
República (Uruguay), en
Cuba por el Ministerio de Educación Superior (MES) y en la
UCV (Venezuela),
todos ellos con la asesoría de
UNESCO-IESALC.
Tal vez el fenómeno nuevo más relevante en
lo que respecta a las políticas educacionales lo
constituya la introducción generalizada de regulaciones
que establecen la búsqueda de un porcentaje de financiamiento
por las universidades públicas. El Estado asigna de un 50%
a un 70% de los recursos y las universidades deben obtener el
resto de los recursos: competitivamente (optando por diversos
fondos), a través del cobro de aranceles y
del crédito
estudiantil y obteniendo recursos para la investigación de
fondos sacados a concurso.
En resumen, el financiamiento de la educación
superior se ha vuelto más diverso. Parece, por otra parte,
haber cristalizado un consenso acerca de que la ES no puede ser
considerada únicamente un bien privado supeditado a las
fuerzas del mercado. Igualmente, se ha llegado a la
conclusión de que las reformas inducidas desde afuera, si
no se internalizan y van acompañadas de reformas desde
adentro, no convierten a las IES en organizaciones
emprendedoras, innovadoras, de mayor calidad y más
pertinentes en cuanto a sus funciones básicas si bien es
cierto que los sistemas de ES han pasado de la simplicidad y la
homogeneidad a la complejidad y la heterogeneidad en la
última década, no es menos cierto que del
descontrol de los ‘80 se ha pasado a la formulación
de políticas que controlan la calidad mediante la
evaluación institucional. Es cierto que son
políticas incipientes que tal vez aún no marquen
una modificación sustancial en cuanto a lo que la
transformación de las IES se refiere, pero es sin duda un
importante cambio y el prerrequisito para lograr un verdadero
cambio cualitativo.
La orientación meramente de mercado de muchas
universidades privadas, de un lado, y el concepto tradicional de
autonomía corporativa, de otro, parecen ser algunos de los
principales obstáculos para que se logre este cambio
cualitativo. La apropiación de la universidad por una
lógica corporativa es la perversión de la
autonomía. La universidad deja de ser una
institución de y para la sociedad, para convertirse en una
institución de y para los integrantes de la comunidad
universitaria.
En resumen, desde principios de los
‘90 hasta el presente, si bien se adoptó ante la
expansión cuantitativa y las restricciones fiscales un
nuevo marco conceptual provisto, en gran medida, por los aportes
teóricos y análisis empíricos de
instituciones como UNESCO y sus redes de Cátedras UNITWIN
y de los investigadores vinculados a ellas, no podemos sin
embargo afirmar que estas políticas hayan modificado
esencialmente las modalidades de conducción de la ES. Lo
que prevalece es una tensión entre las aspectos positivos
y negativos del mercado y del estado, respectivamente.
Redi Santi Di Pol,. Educación, libertad y
eficiencia en
el pensamiento y en los programas del neoliberalismo. Revista de
Educación. No. 283, 1987.
José Ramón
Fabelo. La formación de valores en las nuevas
generaciones. 1995
Sonia Aparecida. Valores en la Educación.
1998.
Carmen García Guadilla. 1998. La educación
superior en Venezuela: una perspectiva comparada en el contexto
de la transición hacia la sociedad del conocimiento"
Cuadernos de CENDES. No 37.
Juan Antonio Blanco. Tercer Milenio. Una visión
alternativa de la posmodernidad.
CEPES. Tendencias pedagógicas
contemporáneas. 1996.
Eduardo R. Avila Rumayor. La educación para el
trabajo en la sociedad neoliberal. Revista Contexto y
Educación # 64. 2001
MINELAD VII, 1996. educación, democracia, paz y
desenvolvimiento. Recomendaciones de la VII reunión de
Ministros de Educación de América Latina y el
Caribe. Santiago de Chile. UNESCO.
Odalis Bouza Betancourt .Ponencia Universidad
2000.
Maria Egilda Castellano.
Ponencia al V taller internacional sobre la educación
superior y sus perspectivas. La Habana 7- 12 de febrero del
2000.
Felipe Sánchez Linares. ¿Es ciencia la
filosofía? 1988.
Joao Arnoldo Gascho. Escuela, comunidad y democracia.
Una visión crítica, UNOESC. 1998.
Lic. Juliet Gelavert Jardines
CENTRO DONDE LABORO: Universidad de Holguín "
Oscar Lucero Moya"
Dirección Particular: Calle 3ra N0 13. REPARTO
José Díaz. Holguín. Cuba
La autora de este trabajo es la Lic. Juliet Gelavert
Jardines, Lic en Educación, especialidad Historia y Ciencias
Sociales, que imparte las asignaturas Economía
Política I y II en la Universidad de Holguín.
Investigo en el campo de las Ciencias Pedagógicas,
desarrollando específicamente la temática: La
Formación de valores en la educación superior. Me
encuentro cursando una maestría en Desarrollo Social
en FLACSO( facultad Latinoamérica de Ciencias sociales) de la
Universidad de la Habana y un Doctorado en Ciencias
Pedagógicas en la Universidad de la provincia de
Holguín. Este trabajo que les envío es un resultado
de ambas y formará parte de ambas tesis de
investigación.