Sociedad precapitalista
La categoría precapitalista fue acuñada por C. Marx en un ensayo conocido coloquialmente como "Las Formen" o Formaciones sociales que anteceden a las sociedades capitalistas". En él, Marx describe y analiza aquellas formaciones sociales comunistas primitivas, las esclavistas, feudalistas, del modo de producción asiático, las sociedades eslavas, las germanas y el mercantilismo; es decir las formaciones socioeconómicas que no recurrieron a la producción industrial, a la compra de fuerza de trabajo para obtener de ella plusvalía y a la acumulación de capital.
1. El modo de producción
1.
A cada formación social le corresponderá un determinado modo de producir socialmente los bienes necesarios para …ver más…
En este último caso la relación de dominación es una relación explotador-explotado, en la medida en que los propietarios de los medios de producción viven del trabajo de los no propietarios. Para Marx, esta relación de explotación es la típica de las sociedades clasistas: la sociedad esclavista, la feudal y la capitalista.
2.
Las relaciones de producción favorecen inicialmente el desarrollo de las fuerzas productivas; pero a medida que las fuerzas productivas se van desarrollando, terminan por entrar en contradicción con las relaciones de producción existentes, convirtiéndose éstas en una traba para el desarrollo de aquellas, lo que provoca una revolución social, que concluye en la sustitución de las viejas relaciones de producción por otras nuevas, adecuadas al grado de desarrollo de las fuerzas productivas. Tales contradicciones, y la resolución de las mismas, determinadas por procesos estrictamente materiales, constituyen el elemento configurador de la sociedad y el motor de la historia.
1.b. Superestructura jurídico-política
La superestructura jurídico-política está formada por el conjunto de normas, leyes, instituciones y formas de poder político que, condicionadas por la estructura productiva, ordenan y controlan el funcionamiento de la actividad productiva de los ciudadanos. Las formas del Estado no son, pues, la realización del Espíritu Absoluto, sino los instrumentos a través de los cuales las clases dominantes ejercen su poder sobre las