ARTURO Y LA CIUDAD PROHIBIDA.
AUTOR: Luc Besson
EDITORIAL: Ediciones B, Grupo zeta
AÑO Y LUGAR DE PUBLICACIÓN: 2006, Barcelona.
Págs.: 1-25
Al principio Alfred (el perro de Arturo y su abuela) ve el atardecer después de una larga siesta. Un joven gavilán observa los alrededores de la casa de la abuela de Arturo.
Dentro de la casa se encuentra la abuela de Arturo, quien ha desaparecido misteriosamente.
Al igual que su abuelo hace 4 años, Arturo desapareció en el jardín de la casa. Los dos tenían el mismo propósito: encontrar un tesoro.
La abuela ha registrado cada extremo del jardín y de la casa en busca de su único y adorable nieto. Pero por mas que a buscado no a encontrado ningún rastro de el.
De pronto los papas de Arturo …ver más…

La abuela menciono que todas las noches Arturo y ella hablaban de África y de los diarios de viaje de su abuelo, quien también era poeta y llenaba de cuentos y leyendas sus relatos, como la de los bogo-matasaláis y sus diminutos amigos, los minimoys. Esa era la historia preferida del abuelo y Arturo, quien aseguraba que los minimoys vivían en el jardín. Pero ¿Qué relación puede tener eso con la desaparición de Arturo? Por desgracia, el señor Davido, quien es el propietario de la casa de la abuela, quiere recuperarla, a menos que sea comprada. Arturo ha entendido enseguida que su familia tiene problemas de dinero y quiere encontrar el tesoro que el abuelo había recibido como regalo de los minimoys. Este estaba escondido en el jardín y al escuchar eso los padres de Arturo decidieron cavar hoyos por toda la casa.
Ya es de noche y Arturo, Selenia y Betameche han llegado a Necrópolis. El cual, al parecer se ha convertido en un infierno. Aun falta mucho por enfrentar, apenas es el principio de esta gran aventura.

ARTURO Y LA CIUDAD PROHIBIDA
Págs.: 50-190
El jardín de la abuela esta hecho todo un desastre. Ya es de noche, los padres de Arturo aun siguen cavando y acaban de sufrir un accidente. La mamá de Arturo en su intento de satisfacer la sed de su esposo le llevo una jarra de agua que no exactamente termino en la boca de su esposo.
El grito espeluznante de los padres de Arturo resuena hasta el fondo de las Siete