Parabola del pesimismo
Gabriel García Márquez.
Los rumores son un elemento de la comunicación. Muchas veces son el único elemento de juicio acerca de una persona o una situación...y peor aún :muchas veces obramos a partir de ellos. Sus consecuencias, los conflictos, los malos entendidos a nivel personal, familiar, laboral, saltan a la vista.
Les voy a contar por ejemplo, la idea que me está dando vueltas en la cabeza hace ya varios años y sospecho que la tengo bastante redonda. Imagínese un pueblo muy pequeño donde hay una señora vieja que tiene dos hijos, uno de 17 y la hija menor de 14. Está sirviéndoles el desayuno a sus hijos y …ver más…
El carnicero despacha su carne y cuando llega otra señora a comprar una libra de carne le dice: “Lleve dos porque hasta aquí llega la gente diciendo que algo muy grave va a pasar en este pueblo y se están preparando, y andan comprando cosas”. Entonces la vieja responde: “Tengo varios hijos, mire mejor deme cuatro libras”. Se lleva cuatro libras y para no hacer largo el cuento, diré que el carnicero me media hora agota toda la carne, mata otra vaca, se vende toda y se va esparciendo el rumor. Llega el momento en que todo el mundo está esperando que pase algo. Se paralizan las actividades y de pronto, a las dos de la tarde, hace calor como siempre. Alguien dice: “se han dado cuenta del calor que está haciendo?. “pero si en este pueblo siempre ha hecho calor”. Tanto calor que es un pueblo donde los músicos tenían los instrumentos remendados con brea y tocaban siempre a la sombra porque si tocaban al sol se les caía a pedazos. “Sin embargo,-dice uno-nunca a esta hora ha hecho calor”. “Pero si a las dos de la tarde es cuando hay más calor”. “sí, pero no tanto calor como ahora”. Al pueblo desierto, a la plaza desierta baja de pronto un pajarito y se corre la voz:
“Hay un pajarito en la plaza”. Y viene todo el mundo espantado a ver el pajarito. “Pero señores, siempre ha habido pajarito que bajan”. “Sí, pero nunca a esta hora”.Llega un momento de tal tensión que los habitantes del pueblo están