Fontana, J. Europa Ante El Espejo (Reseña)
Josep Fontana (Barcelona, 1931) se licenció y doctoró en Historia por la Universidad de Barcelona, y fué profesor de Historia económica y contemporánea de las universidades de Barcelona, Valencia y Autónoma de Barcelona. Intelectualmente se inspiró en E. P. Thompson (historiador británico e intelectual del socialismo humanista), Pierre Vilar (historiador e hispanista francés, referente de la historiografía catalana), Antonio Gramsci (teórico marxista italiano) y Walter Benjamin (filósofo y crítico literario alemán, vinculado a la escuela de Frankfurt). Se especializó en Historia económica, desarrollando una extensa e intensa actividad académica cuyo fruto han …ver más…
El neolítico y la domesticación de plantas y animales se extendió desde Mesopotamia a una velocidad de 1km/año atrapando a las gentes en estructuras políticas y sociales de las que acabaron dependiendo, generando síntesis con las viejas formas de subsistencia basadas en la caza y recolección.
Resulta irónico que los griegos, cuyos orígenes se hallan en migraciones de pueblos pastores indoeuropeos4, reclamaran suya una mitología que ponía sus dioses en Creta..., cuando los pobladores originales de la Hélade y Creta, que ellos desplazaron y extinguieron, eran de origen anatolio. Crearon la ficción del espejo del “bárbaro” asiático (el Persa) como onomatopeya injuriosa para todo aquel que no se hiciese entender en griego... cuando estos persas tenían mucho más en común con ellos (lengua, creencias) que los pueblos anatolios sobre los que ellos quisieron fundar sus orígenes... Desde ese espejo construyeron su idea de polis y democracia, superior y opuesta a las teocracias asiáticas, como síntesis de libertad por oposición al servilismo de los súbditos orientales. Esta visión desformante permitió ocultar las profundas desigualdades sobre las que se asentaba la sociedad griega, a la par que esconder o apropiar las abrumadoras aportaciones de los pueblos orientales: la escritura, la ciencia y la técnica que, antes que ellos y mucho después de ellos, habían tenido su origen y continuarían su curso principalmente en la llanura mesopotámica. Lejos de esa visión