INTRODUCCION

La ética se define de manera sencilla como la actuación y tome de decisiones de una manera correcta e integra delante de la sociedad, por lo tanto ética ministerial se define como: Actuar, decidir y comportarse de manera correcta, de acuerdo a la Palabra de Dios.

Hay ciertos aspectos y situaciones prácticas que el ministro debe tener en claro al momento de tomar decisiones, al momento de hablar, actuar y pensar, aspectos que involucran la vida personal del ministro, su vida familiar y cristiana. Desde el Antiguo hasta el Nuevo testamento encontramos normas de conducta que Dios ha instruido para el hombre, tomando en cuenta que el ministro es observado y juzgado en todo momento y en todo lugar por la sociedad …ver más…

7) Como se comporta entre los hermanos en la fe.
8) Su vida devocional personal, cuidado de sus dones y espíritu.

Es también importante que el ministro sea ético en su personalidad: refiriéndonos a que debe ser genuino, cuidándose de no imitar a ningún otro siervo. Pues Dios da a cada uno sus propios dones, sus propias cualidades y talentos y su propio propósito; tomemos en cuenta también que cada ministro edifica a diferentes personas, por ello la variedad de ministerios y personalidades.

EL CUIDADO DE LAS ALMAS COMO PROPOSITO PRIMORDIAL

Otro aspecto que tiene que ver con la ética es el cuidado de las almas, esto es, velar por ellas y actuar conforme al beneficio de estas. El ministro fue escogido por Dios no para ser jefe, sino para ser siervo y edificador de la iglesia, para cuidar de las ovejas débiles y pequeñas del redil, y para instruir y discipular a las ovejas más grandes.

Cada decisión y consejo que efectúe el ministro debe tener el propósito de edificar las almas, tratando siempre de beneficiar al mayor número de almas posible. Cuidando primero las almas de su familia carnal para poder así ser luz para las almas fuera de su casa.

Una manera de cuidar las almas es siempre dejarles en claro el porqué de tal o cual decisión, explicarles siempre el por qué se les esta exhortando, instruirles al perdón, y hacer todo esto con amor. Todo lo que se haga debe hacerse en amor fraternal, sin engaños ni