EL TRIUNFO DE LA CONCIENCIA

Ignacio Ovalle Fernández, pensador especialista en valores humanos y autor del libro “El Triunfo de la Conciencia”, ha escrito más de 15 ensayos sobre temas relacionados con la dimensión ética. Es originario de la ciudad de México. Egresado de la UNAM por la Facultad de Derecho, Doctorado en Ciencias Políticas en la Universidad de Belgrano, Argentina. Durante 3 décadas trabajó para el gobierno federal en diferentes tareas a nivel ministerial.

Embajador en Argentina y Cuba, director de varios organismos públicos descentralizados y diputado del Congreso Federal. Desde 1997 se dedicó a impartir cursos y conferencias en torno a un solo tema: los Valores Humanos.
Ha impartido más de 120 cursos completos sobre …ver más…

2. La Libertad

Si no existe la libertad, no hay la posibilidad de plantear ética alguna. Sin libertad tendría que aceptarse como inevitable toda acción humana y no habría diferencia ante un acto heroico e ir al baño. No quedaría más remedio que reconocer a todos los criminales como inocentes víctimas de su condición, naturaleza, estructura física, su educación, circunstancias, etc.

El ser humano puede cambiar si usa su libertad. Lo que mueve nuestra libertad y nuestra voluntad desde la psicología parecería algo contradictorio, porque según Freud estamos determinados por el inconsciente, que nos hace menos libres. Manifestados en la represión, negación racionalización, formación reactiva y la proyección, todos mecanismos de defensa que se instalan en el inconsciente originados por el miedo. Para Jung, estamos determinados por un pasado colectivo, que se manifiesta en el inconsciente colectivo a través de patrones psicológicos que se manifiestan en la conducta actual. Para el conductismo no existe diferenciación entre animales y seres humanos; ya que, los factores del ambiente determinan la conducta, basta con estimular desde el exterior para obtener una conducta predecible y olvida el interior del ser, sensaciones, sentimientos y deseos.

El cuerpo y la conciencia no son lo mismo, pero son inseparables. Por tanto elegimos acciones no conscientes dictadas por nuestras creencias, necesidades y patrones