el caso de la esposa del novelista
Era una hermosa joven, de no más de veinticinco años. Vestía de negro.. El portero de la revista donde trabajo la había anunciado simplemente como una persona que quería verme. Para mí era totalmente desconocida. Parecía un poco nerviosa y le ofrecí asiento.
—Señor Zamora, dijo con una voz que me gustó, quisiera hacerle una pregunta… un poco rara.
—Beltrán Rojas existe, me apresuré a asegurar, y como me parece que usted está afligida por algo que quizás él podría aclarar, me ofrezco para presentárselo. Sonrió. La seguridad que yo le daba de que Beltrán no es un personaje de novela, sino un detective de carne y hueso, pareció transformarla.
—No estoy sólo afligida, sino verdaderamente angustiada …ver más…
En el velador hallaron su pluma fuente y una carta, unas pocas palabras… Explicaba la pobre que las desavenencias con su marido le abrían la perspectiva de una vida sombría, y que ella prefería la muerte… El papel se lo llevaron los detectives al día siguiente, pero yo lo leí y lo tengo grabado en la cabeza… Su carta decía: “La vida así no vale nada. ¿Para qué guardarla? Pasar de un disgusto a otro, de una pelea a otra, vivir como extraños, a veces con odio que se refleja en los ojos, no es vivir. Prefiero la muerte y ella será mi refugio para escapar a una vida que me pesa como una cadena…”.
—Bueno, eso es todo. A la mañana siguiente, cuando me avisaron, corrí a la casa de Emilia.
El juez determinó que el suicidio no merecía dudas, y después de la autopsia sepultaron a mi hermana. Eso es todo… salvo una pequeña cosa, que es lo que constituye la duda que tengo. Yo le pregunto señor Rojas, ¿cómo puede suicidarse una persona feliz?
—¡Pero usted misma ha dicho que su hermana era desgraciada! —exclamó Beltrán.
—Sí, pero lo que no le he dicho todavía es que la víspera del suicidio, el día viernes, Emilia pasó a verme al Ministerio de Economía, donde trabajo, y me dijo que estaba feliz, que dos o tres días antes se había reconciliado con Raúl, estaban preparándose para ir a pasar unos días en Viña del Mar y que proyectaban también un viaje a Europa…
—Pudieron haber