EL ROSTRO OCULTO DE LA VIOLENCIA
FRANCISCO JAVIER URIBE PATIÑO
MARÍA TERESA ACOSTA ÁVILA

Violencia es la gran gama de hechos tanto individuales como grupales y colectivos, como el suicidio, delincuencia, crimen, narcotráfico, etc., es extendido también a las dimensiones culturales, sociales y políticas sin dejar de lado las actitudes psicológicas, y no solamente en el aspecto físico. En este aspecto se introduce la violencia simbólica que no es más que la ejercida por el sistema, el Estado y los grupos poderosos de dominación, que no buscan más que prohibir que los dominados ejerzan por si mismos una mentalidad que les haga darse cuenta de la dominación de la cual son objeto y mucho menos darse ideas acerca de su liberación.

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La representación Social es un sistema de valores nociones y practicas relativas a objetos, aspectos y dimensiones del entorno social, que permite la estabilización del marco de vida de los individuos y de los grupos además de construir un un instrumento de percepción de situaciones y respuestas. Mantiene un gran interés en el análisis de los fenómenos, como la cultura, educación política, educación y religión, mas para poder conocer el orden que rige el pensamiento social. Un señalamiento es que los objetos están mediados por el conflicto, vinculo que se establece entre los grupos y el objeto.

Los individuos, como los grupos sociales, están determinados no solo por las características objetivas de su entorno, sino también por la manera en que le dan un valor y una significación a la violencia y a las normas.

La conspiración significa acuerdo, unión, complot. Dentro de estos conceptos podemos relacionar a la conspiración con el delito. Dos de los temas que nutren la conspiración es la intriga y el maniqueísmo. Previo a que se materialice la intriga, la imagen que se proyecta de la sociedad, es aquella en donde la armonía se priva, y en este aspecto cada persona hace lo que tiene que hacer o lo que quiere hacer. Cuando esa imagen de la sociedad desaparece, se activa el maniqueísmo, que da paso al conflicto, desorden y desestabilización de las instituciones, para encarnarse en grupos de violencia encarnada, como los miembros culpables y responsables de la