Resumen del libro "los escarabajos vuelan al atardecer"
EL SUEÑO
En el día de cumpleaños de Jonás, sus padres le regalan un magnetófono para sus investigaciones. Jonás, junto con Annika y David, graba todo tipo de sonidos: el ruido del tren, el sonido que emiten los insectos en su vuelo, estando en el campo, comienzan a andar y sin darse cuenta, llegan a una quinta, era la quinta Selanderschen.
Ya había oscurecido, pero aun así, Jonás sube a un árbol para poder ver lo que ocurría dentro de la quinta y comienza un reportaje sobre todo lo que ve en el interior de la casa.
Aunque nunca habían estado allí, David, la noche anterior había soñado con aquel lugar, y le daba la sensación de conocerla.
LA MALDICIÓN
Después de que Jonás y Annika se fueron a casa, …ver más…
Por otro lado, Annika no pensaba ceder en cuanto a subir al cuarto de verano.
Como cada día, fueron a la quinta, y la planta seguía señalando hacia el interior de la casa; ellos se extrañaron, ya que David el día anterior había dado la vuelta a la maceta poniendo las hojas en dirección a la luz de la ventana.
Aunque Annika había decidido no ceder, subieron al piso de arriba e inspeccionar el desbán. Abrieron la puerta azul, y una vez dentro, entró un escarabajo por la ventana, pero cuando Jonás estaba jugando con él, se cayó entre las grietas del piso e intentaron sacarlo. Cuando David metió la mano, encontró un estuche. Entonces sonó el teléfono en el piso de abajo, los chicos guardaron el estuche en su lugar y bajaron a responderlo, pero ya era demasiado tarde.
LA CARTA
Sonó de nuevo el teléfono y David fue a contestarlo. Era Julia, y esta le invitó a comenzar una partida de ajedrez. Subieron de nuevo y abrieron el estuche encontrado, dentro contenía unas cartas y un broche. Leyeron dos cartas; una escrita por Emilie y otra por Magdalena Ullstadius. Estas cartas les intrigaron mucho a los chicos surgiéndoles interrogantes ya que Emilie moriría pronto y quería ser enterrada en tierra no sagrada junto con Andreas.
Una de las cartas, también hablaba sobre una estatua egipcia que estaba maldita y que debía de encontrarse dentro de algún banco en aquel cuarto.