Movimientos voluntarios e involuntarios del cuerpo
Además, duermo …ver más…
Alguna gente pasa y ni me ve; otras dicen: "No te acerques". Ya casi estoy inconsciente, pero alguna fuerza extraña me hizo abrir los ojos. La dulzura de su voz me hizo reaccionar. "Pobre perrito, mira como te han dejado", decía... junto a ella venía un señor de bata blanca, empezó a tocarme y dijo: "Lo siento señora, pero este perro ya no tiene remedio, es mejor que deje de sufrir."
A la gentil dama se le salieron las lágrimas y asintió. Como pude, moví el rabo y la miré agradeciéndole que me ayudara a descansar... Sólo sentí un pinchazo y me dormí para siempre, pensando en porqué tuve que nacer si nadie me quería... La solución no es echar un perro a la calle, sino educarlo.
No conviertas en problema una grata compañía.
Ayuda a abrir la conciencia y así poder acabar con el problema de los perros