Aun recuerdo aquella noche. Mientras oraba sentía una inquietud tan grande que no me dejaba tranquila. No sabía como explicarlo, hasta que vi a Juan correr hacia mi y decirme: María, apresaron a Jesús, Judas nos traicionó. Él entregó al maestro a los sacerdotes. Vamos, hay que detener esta locura.

Después de arrestarlo lo llevaron ante varios tribunales para juzgarlo. Lo hicieron de noche para no levantar sospechas ante el pueblo. Cuando se enteraron que solo Pilato podía dar la orden para matarlo, fueron donde él. Pilatos se dio cuenta que Jesús era inocente y le quiso soltar pero vio a esa gente tan furiosa que le mando a azotar para ver si se calmaban y cambiaban de parecer.

A la distancia viendo como te golpeaban, como hacían …ver más…

A costa de lo que fuera, aun de que Barrabás acometiera contra ellos o su familia en cualquier momento suplicaban la muerte de mi hijo diciéndole: ¡Crucifícale, crucifícale! A todo esto Pilato se lavó las manos y le entregó ante ellos para que le crucificaran pues él no halló causa para culparle y matarle. …….Y Jesús en silencio.

Te pusieron una corona de espinas y un vestido de escarlata para dar por hecho lo que les decías, que eres Rey de los judíos; y tu cuerpo todo destrozado, y aun así te hicieron cargar un madero junto a otros 2 malechores para acabar con tu vida. Estabas tan herido y cansado que mandaron a un tal Simón de Cirene que te ayudara con la cruz pues ya tu cuerpo no daba para más. Y al llegar al lugar de la Calavera, el Gólgota te despojaron de tu vestido y traspasaron clavos sobre tus manos; sobre aquellas manos que bendecían, que curaban, amanos ásperas por el trabajo de carpintería con tu padre, esas manos que acariciaron tantas veces mi rostro; y tus pies y tu costado traspasado. ¡Cuanto dolor! Hubiese querido apartar la mirada, pero no… ¡Ahí estuve para ti! Junto a tu cruz me quedé con Juan y María Magdalena cuando escuché que ya sin fuerzas me decías: Madre he ahí tu hijo; y a Juan le dijiste: Hijo, he ahí tu madre.

Falleciste habiendo cumplido con tu misión en este mundo. Naciste para morir en esa cruz. ¿Qué sería de la humanidad si no hubieras nacido y soportado todo esto?

Le supliqué a los soldados