La polis para platón
Los actos simples, que son la regla general, proceden de un solo ente y órgano administrativo (ejemplo, órdenes de un Alcalde de cerrar un establecimiento), mientras que los actos complejos emanan de varios órganos o entes en el ejercicio de competencias compartidas (ejemplo, órdenes ministeriales conjuntas aprobadas por varios Ministerios).
Actos unilaterales y actos bilaterales
Los actos unilaterales emanan de la exclusiva voluntad de la Administración que los dicta (por ejemplo una sanción), mientras que los actos bilaterales necesitan de la aceptación del sujeto al que se dirigen (por ejemplo, el nombramiento de un funcionario). En este caso, la aceptación no afecta a la validez del acto, sino a su