La música de raíz folclórica en latinoamérica y los movimientos de nueva trova y nueva canción.
Cuando una junta militar tomó el poder en 1973, muchos de ellos fueron asesinados, y otros se exiliaron en Europa. Los que sobrevivieron, han regresado a su país durante los años 1990. Nuevos grupos y solistas chilenos siguen cultivando con gran éxito y creatividad este género musical, con particular énfasis en la instrumentación indígena andina.
En Argentina, la Nueva Canción tiene una presencia considerable, con cantautores tan reconocidos como Horacio Guaraní, Facundo Cabral, Alberto Cortez y Atahualpa Yupanqui. Originaria de Tucumán, en la zona norte de Argentina donde predomina la población mestiza y de ascendencia indígena, la cantante Mercedes Sosa –“la negra” –, es una embajadora de la Nueva Canción latinoamericana, que ha llevado los temas más populares a todas partes del continente americano y europeo. Su bella voz es reconocida por cualquier latinoamericano, joven o viejo.
La “Nueva Trova” es la versión cubana de la Nueva Canción latinoamericana. Aparece a mediados de los años sesenta, como expresión de la alegría y el orgullo con que las generaciones jóvenes percibían los cambios revolucionarios en Cuba, de las nuevas relaciones socioculturales que se estaban formando, y de solidaridad con las luchas por la justicia social en otros países latinoamericanos. Se estableció como movimiento a partir de un concierto de Silvio Rodríguez, Pablo Milanés y Noel Nicola en La Habana, en 1965. Su creación estética se presenta como continuación de