Fertilizacion In Vitro
En agosto de 2010, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos estableció que la decisión de la Sala IV de prohibir la Fertilización In Vitro (FIV), tomada en el año 2000, violó los derechos humanos a estar libre de injerencias arbitrarias en la vida privada, a fundar una familia y a la igualdad. Como respuesta, el gobierno de Laura Chinchilla presentó un proyecto de Ley a la Asamblea Legislativa, que lejos de cumplir con las recomendaciones de la Comisión, se convierte en una amenaza para los derechos que debiera proteger.
Quienes solicitan la fecundación in vitro suelen ser parejas o mujeres que por una u otra razón no tienen las condiciones para tener un …ver más…
Y decimos “a las mujeres” porque a los hombres no se les condiciona a gozar de “buena salud”.
Otra situación discriminatoria es que los Artículos 8 y 20 prohíben y penalizan la donación de embriones y prohíben que una mujer se implante óvulos distintos a los propios. De esta manera, se niega la posibilidad de la maternidad a aquellas mujeres que necesitan acudir a la fertilización in vitro justamente porque sus óvulos no son aptos para la concepción; pero además también vulnera los derechos de la mujer que quiere donar sus óvulos, sobre todo teniendo en cuenta que la donación y uso de esperma no está controlada ni prohibida.
Asunto de dinero
Finalmente, el proyecto establece una barrera económica. Teniendo en cuenta que cada tratamiento de FIV cuesta entre US$7.000 y US$15.000, es de suponer que la CCSS no autorizaría varios tratamientos a la misma pareja o mujer. Esto, en la práctica podría obligar a las mujeres a fertilizar muchos óvulos y luego transferirlos, con la esperanza de que alguno se implante en el primer ciclo exponiéndose los riesgos ya mencionados. De estos peligros podrían eximirse las mujeres que puedan pagar varios ciclos de FIV en los servicios privados, en los cuales se fertilicen e implanten pocos óvulos cada vez.
Las manos (in) visibles
La fertilización in vitro fue prohibida en Costa Rica en el año 2000, convirtiéndonos en el segundo país del mundo en no