Salomé
Fernando González
1934

Informe de lectura:

MARZO.

Acabé Mi compadre, me encerré dos meses y medio y fue agradable el trabajo. Esta mañana desperté con la sensación de Dios y de que pronto me iré del cuerpo. Pensé escribir mis confesiones. Percibo la muerte en la primavera, en el verano hay promesa de muerte.

Veo a la muerte en las mujeres tan bellas y en los árboles que echan renuevos. No me agrada la alegría.

Recibí una carta de Alfonso en la cual portaba insultos de EL TIEMPO, me dio un ataque de odio.

Recibo odio de Colombia, hoy me pondré a la defensiva. Colombia es un país de malas pasiones. Hasta Margarita percibe las malas vibras.

Salome esta intranquila, los gatos la persiguen, el gato negro de los …ver más…

Me levante a las cinco de la mañana para abrirle la puerta a Salomé, allí se encontraba el gato negro esperándola. Escucharon un ruido y Salomé trepo en un árbol, el gato la esperaba abajo luego de bajar se fueron detrás de los arbustos. Cada diez minutos se escuchan los chillidos de Salomé. Y no me atrevo a ir allí.

Dentro de poco todos seremos una partida de gatos preñados, pelados, porque el hombre después del coito es animal triste.

La vieja Babí es alocada y un genio de personalidad; tiene tabaco en la vejiga. La señora Babí va siempre con Pató y, por las noches, con Robert, en el autico de Robert y el pobre bobo suda por ella. Robert es un excremento humano al lado de su novia.

Mediodía: creo que Salomé quedó ya satisfecha; no se ve por ahí a ninguno de los amantes, y ahora la saqué y estuvo tranquila; se revolcó en el jardín. Los canarios que creíamos machos, hoy estaban armando nido, se les dio un algodón y una cajita.

Salomé anda con el Rousseau, pero no se deja; ama su compañía, diálogo mudo. Ella es la que lo busca ahora. El Rousseau es viejo, camina a lo viejo, pero Salomé lo prefirió al gato de los Lionel, que es más valiente y brusco. Que sirva este misterio de la afinidad para consuelo de los que envejecemos.

Los canarios ya fabrican su nido, la pajarita toda redondita con los huevitos dentro.

Había anotado que las mujeres cuando ya no aman no se acuerdan; se enojan cuando se les recuerda. También los