Universidad Central del Ecuador
Facultad de Comunicación Social
Literatura y Sociedad

Alumna: Zulay Lara
Nivel: Propedéutico “A”
Fecha: 09-07-12
Autor : Arthur Koestler

Espartaco- La rebelión de los esclavos

Novela que enmarca uno de los sucesos más importante de la roma republicana. La rebelión de gladiadores y esclavos liderada por Espartaco. Este hecho desenmascara distintas realidades que aquejan estas sociedades. Muchos pensamos que este conflicto era simplemente una indulgencia de rebeldía por parte de un grupo de forajidos que no están de acuerdo con el gobierno romano. Pero la realidad es otra. Aquí no solo se da pérdidas humanas por los enfrentamientos, sino que también se desarrolla una gran decadencia moral. …ver más…

El entusiasmo de buscar un vida mejor era lo que los motivaba a seguir y a pesar de las adversidades como la construcción de una trinchera por parte de Marco Creso, quien quería aniquilar por completo a la rebelión justiciera. Además consigo la burla y estafa del navegante Demetrio, quien por una costosa cantidad, ofreció cruzar al pueblo Espartaco a la isla y así estos se salvarían de la persecución hambrienta del ejercito romano.

Los esclavos ya no tenían fuerzas, sus mujeres sostenían las bocas de sus hijos, ya con sus pechos flácidos y vacios. Las enfermedades estaban acechando de gran manera esta legión. Niños y adultos estaban completamente desnutridos. Pero aun así seguían en la lucha. Manifestaban que aun es mejor la vida que la muerte, aunque esta los aqueje con malezas y dolores.

Después de aplicar varias estrategias, Espartaco agotaría la última posibilidad. Esta seria negociar con Marco Creso. Pero el resultado no fue el esperado. Así que no quedaba más que prepararse para la sangrienta batalla. Llegado el día paso lo esperado. La mitad del ejército de esclavos ya había sido aniquilada, y los demás luchaban, descalzos, contra hombres de armadura; madera contra hierro, carne contra acero. Más que una batalla fue una masacre, y las víctimas, movidas por la desesperación y fascinadas por la muerte, se arrojaron voluntariamente a los brazos de sus ejecutores. Cuando el sol ya había pasado su cenit, los romanos