El Pozo Y El Péndulo (Guión Teatral)
| |
Acto I
Escena I
Personajes: Narrador.
(Tribunal inquisitorial: es una sala obscura y decorada con muebles del mismo color. Un inquisidor jurista está sentado en su escritorio con una vela encendida y está escribiendo una carta.)
(El narrador habla desde afuera del escenario)
Narrador: Todo empezó aquella tarde de Diciembre. Había estado lloviendo todos los días por meses y las calles estaban desiertas. Una mujer desesperada y cegada por la rabia llegó al tribunal inquisitorial de la ciudad de Toledo con un solo propósito: vengarse de un ser querido.
Escena II
Personajes: Mujer e inquisidor jurista.
(Misma escenografía de la escena anterior. Mujer con …ver más…
Hay un hueco en la mitad de la habitación y un plato de pan al lado de Juan. El Narrador esta a un lado del escenario.)
Narrador: La celda era fría y húmeda. Juan despertó y pronto se dio cuenta de que lo que estaba viviendo no era el infierno, sino que aún estaba vivo. Por primera vez en mucho tiempo Juan estuvo seguro de algo: su estadía en el calabozo iba a ser peor que la muerte.
Juan: ¿¡Hay alguien aquí!?
Narrador: Juan se arrodilla al lado del plato y lo hace a un lado. Empieza a arrastrarse por la habitación y se rinde al rato. Se quita las cuerdas y empieza a andar por la habitación.
Juan: (desesperada y agitadamente, mirando en todas las direcciones) ¿Qué tipo de muerte habrán escogido para mí? ¿Cómo se supone que salga de este lugar? ¡Debieron matarme de una vez! (entrando en pánico) ¡Estar aquí es una agonía insoportable! (Colapsa y se queda tendido en el suelo con la cara en sus manos).
Acto IV
Escena I
Personajes: Narrador y Juan.
(Juan esta acostado en el mismo lugar donde quedo la vez pasada. El narrador camina de un lado a otro del escenario.)
Narrador: La incertidumbre y la soledad comenzaban a afectar la cordura de Juan. En medio de su desespero por saber cómo terminarían sus días, decidió explorar su celda. Juan se tropieza y su cabeza queda dentro del pozo.
Juan: (Juan se da cuenta de que casi cae en el pozo) ¡Re pámpanos! ¡De que me he