EL MAESTRO: ¿PEDAGOGO,
INTELECTUAL O… MAESTRO?

Oscar Saldarriaga

OFICIO DE MAESTRO, SABER PEDAGÓGICO Y
PRÁCTICAS CULTURALES
EN COLOMBIA, SIGLOS XIX A XXI

El autor emprende este capítulo señalando la búsqueda que han llevado a cabo los maestros en Colombia para empoderarse su saber, se señalan dos referentes de esta construcción que son por una parte el saber pedagógico; que supone el conocimiento, la educación e institución que debía ser destinada a los futuros docentes, y por otra parte tenemos las prácticas culturales que suponen los fines superiores que el estado y la sociedad le ha asignado a la escuela, estos fines superiores se han de tener en cuenta por parte de los mismos (estado-sociedad) para garantizar una educación …ver más…

Saldarriaga nos remite a un texto que habla de que antiguamente se le llamaba pedagogo al esclavo que era encargado de dirigir al niño de clase noble a la escuela y hace una metáfora de el acompañamiento y el acercamiento que hay entre niño y esclavo en este transcurso, donde el esclavo es quien conoce el exterior y este lugar se hace más seguro, le muestra al niño, lo guía, lo acompaña, sin ninguna brecha entre los dos; esta camino se vino a institucionalizar en la escuela, no sé si para bien o para mal, porque se podría decir que se acercó la oportunidad de educar a un gran colectivo a la vez en un mismo espacio y momento, o bien se podría decir que esta brecha se hizo un tanto más amplia.

En un segundo momento el Oscar Saldarriaga representa el oficio del maestro en tres frases dichas por tres pedagogos o intelectuales colombianos, todos ellos desde distintos espacios temporales (ideados por el autor) y perspectivas:
Modo Clásico: “El hombre será lo que sean sus maestros” Don Martín Restrepo Mejía
1886-1930

Humanismo católico
Se tiene como ciudadano ideal al buen fiel.
La iglesia católica era la encargada de controlar la educación, y muchos de nosotros fuimos de una u otra forma influenciados por la esta. El maestro era como un profeta, un artista, un apóstol de modo que su formación era un tanto vocacional, es lo que el autor llama “amor pedagógico” que lo hacía muy entregado a su labor, tenían en su compendio Elementos de