El Cuento De La Caracolita Y El Grillo
Hola mis estimados visitantes:
Aquí les dejo un bonito cuento para reflexionar.
Espero que les guste.
...-Anoche – afirma me contó la historia de una caracolita.
-¿una caracolita?
-sí, y un grillo.
Una nueva pausa. Las bocas entreabiertas y los ojos redondos esperaban ávidos.
La voz infantil del contador de cuentos inicia su relato en medio de un silencio profundo.
Era una caracolita de color rosa: Una mañana dijo a su madre:
-mamá, yo quiero casarme.
-Bueno, dijo la caracol. Ven para que te ponga bonita.
Y la llevó a un charco para lavarle la cara. Le pintó sus labios de color sangre: le puso un traje nuevo y un moñito azul sobre la cabeza y le dijo:
-Vete a la calle para que busques …ver más…
-si me gustas mucho. Pero ... y ¿donde vamos a vivir?
-No te apures por eso Grillito. Yo arreglaré todo.
Presurada se fue a la milpa y cortó una calabaza grande. Con mucho cuidado, alegre le sacó las tripas, la pintó de colorado. Hizo en la parte de arriba una puertecita por donde entra el sol en las mañanas y en la noche la luz de las estrellas.
Se casaron los dos, y vivieron felices, muy felices. La caracolita se levantaba en la madrugada a buscar yerbas para el desayuno, que levaba a la cama donde dormía el grillito. Mientras ella arreglaba la casa y preparaba la comida, él tocaba su violín. Por las tardes salían los dos al bosque; él para cantar y bailar y ella para mirarlo. Se pintaba los labios de tojo y se envolvía en un rebozo azul, eran felices, muy felices, él cantando, bailando y tocando su violín y ella mirándolo... mirándolo... mirándolo.
Esta noche, cuando se metieron en su casita con el fin de dormir, no había estrellas, ni luna, y las ramas comenzaban a llamar a la lluvia con sus voces roncas.
Apenas habían metido en la cama cuando la lluvia comenzó a dejar caer sus goteras gordos que repicaban en el techo de la casa como si fuera Sábado de Gloria.
-Grillito –dijo ella-. Estoy pensando si nos olvidaríamos de cerrar la ventana del techo.
-Duérmete, caracolita duérmete ya mañana veremos si esta cerrada.
-Grillito, ¡levántate a cerrar la ventana, que la lluvia está cayendo dentro de la casa!.
-Duérmete, Caracolita; sola casa se moja, el sol de