OSS
- La Metamorfosis -
(Dramatización)

Personajes:

Gregorio –

Madre –

Padre –

Hermana –

Sirvienta –

Apoderado -

Narrador – K

Escenario:

- La habitación de Gregorio

- Imágenes a plasmar; La puerta y ventana de Gregorio

Las cosas que se van a requerir para la dramatización

- La mesa (encima pañuelos, y el retrato de una mujer)

- La cama – que será la mesa o escritorio - (una colcha, cobija y una almohada)

- Manzanas

Vestimenta:

Gregorio – Ropa negra y mochila (caparazón)

Madre – Ropa común

Padre – Ropa común

Hermana – Ropa común

Sirvienta – Traje de mucama

Apoderado – abrigo y pantalón de gala

Narrador - x

La Metamorfosis …ver más…

(Gregorio se abalanza al suelo y las cobijas amortiguan el golpe).

Apoderado – Se ha caído algo, sí, en la habitación a la izquierda (comienza a caminar hacia la habitación de Gregorio)

Hermana – Gregorio el apoderado está aquí (desde la habitación derecha sin verse ella)

Gregorio – Ya lo sé (dice Gregorio en voz baja)

Padre – Gregorio, el señor apoderado ha venido y desea saber por qué no has salido de viaje en el primer tren y desea hablar contigo personalmente.

Apoderado – ¡Buenos días! Señor Samsa.

Madre – (interrumpe) No se encuentra bien créame usted señor apoderado

Apoderado – ¡Como iba a perder el tren! Gregorio. El chico no tiene en la cabeza nada más que el negocio.

Madre – en cuanto abra la puerta Gregorio lo vera enseguida, por cierto me alegro que este usted aquí señor apoderado.

Gregorio – Voy enseguida.

Apoderado – de otro modo no puedo explicarlo yo espero que no se trate de nada serio.

Padre - Gregorio ¿Puede pasar el apoderado a tu habitación? (en tono impaciente).

Gregorio - ¡No!

Apoderado – Señor Samsa (exclamado y con voz levantada) ¿Qué ocurre? Falta usted a sus deberes de un ver inaudito, le exijo una seria explicación.

Gregorio – Pero señor apoderado, abro inmediatamente la puerta ¡solo necesito un momento! Todavía no me encuentro bien como creía. Por cierto salgo en el tren de las ocho ya mismo estaré en el almacén tenga usted la bondad de saludarme al jefe de