Diversos ordenes normativos (derecho)
Los centros de tratamientos para esta enfermedad no servían, solía acostarme con todos los integrantes, aunque la regla de oro era no hacerlo con nadie en un determinado tiempo y nunca con alguien que pertenezca a ese lugar, simplemente yo no servia para rehabilitarme de esa manera.
Luego de participar de una orgía olímpica… en mi habitación, mis padres me desterraron por completo del ceno de la familia, me dieron plata y se desligaron de mi.
Viaje a otra ciudad y alquile un pequeño departamento que lo conseguí mas barato que cualquiera, bueno, se pueden imaginar por qué. Pero no pude detener a mi adicción, en un par de meses ya la gente se alejaba de mí y me tildaron de muchas cosas… que por cierto, eran ciertas.
Me volví a mudar y volví a conseguir un alquiler muy barato. Esta vez, tuve mas suerte y a la ves, aun más mala suerte. Estaba en la capital, donde pocos se conocían entre si, y mis vicios podían ser mas discretos, conseguí un trabajo en una gaceta de peaje, donde me costo mucho menos mantener mi trabajo fuera de mi apetito sexual. Al mes y medio contraje sífilis, no se de quien (¿como podría?) y esto me ayudo a forjar cierta voluntad sobre mi adicción, pero a la semana de haberme curado sin consecuencias, volví a las andadas. Pasaron 6 meses de trabajo sin futuro, frustración sexual (ya que no importara con cuantos, quienes o como lo hiciera, nunca lograba encontrar la satisfacción