Diseño de un ascensor de 5 pisos
Estaba la Maestra Lucio sentada en el salón
Cuando llega la calaca con una alegre canción
La calaca muy alegre le dice: ¡Vámonos al panteón!
Ella le dice: ¡No porque ocupada estoy!
La calaca enojada salió del salón
Encontrando a Fabricio jalándolo del pantalón
Este se resistía pues aun no le tocaba ir al panteón
De tanto jalarlo este se tropezó.
Después en el laboratorio con Omar se encontró
La calaca le dijo: ¡Vivo no sales hoy!
Temeroso le dijo:
¡Llévate a los alumnos hay muchos por montón!
La calaca enfurecida un grito se hecho
Hasta que con Cantú se encontró
La puso a correr, y ya cansada le dijo:
¡Espérame tantito que ya me falta muy poquito!
La calaca de tanto correr a la …ver más…
1791 Se abolió la Ferme Générale y Lavoisier perdió su posición como administrador de la pólvora y debió abandonar el arsenal. Jean Paul Marat lo acusó.
1793 Comenzó el Reinado del Terror. Se suprimió la Academia de Ciencias. Se ordenó el arresto de los antiguos miembros de la Ferme Générale. Marat, poderoso cabecilla revolucionario, acusó a Lavoisier de haber participado en complots absurdos y exigió su muerte. Marat fue asesinado en julio de 1793 pero esto no evitó que se lo tomara en cuenta. Se cree que la especial inquina con la cual Marat atacó a Lavoisier fue debida a que este había desacreditado públicamente en el pasado un tratado escrito por Marat
1794 Después de un juicio poco justo, que duró menos de un día, un tribunal revolucionario condenó a Lavoisier y a otros 27 a la pena de muerte. Esa misma tarde fue guillotinado junto con su suegro y otros "granjeros de hacienda" el 8 de mayo de 1794 en la Place de la Révolution, (hoy día Plaza de la Concordia). Su cuerpo fue arrojado a una fosa común. Dos meses más tarde, los radicales fueron depuestos, por lo que su caso es considerado como la fatalidad más deplorable de la inaugurar bustos de su persona. Logros académicos
1765 Recibe la medalla de Oro de la Academia ótica industria de la pólvora. Esto le dio la oportunidad de moverse al Arsenal de París donde montó un soberbio