Me llamo Belinda, cuento con 15 años de edad, hace dos meses que los cumplí. Soy relativamente normal , no suelo vivir grandes emociones. Disfruto del cantar de las aves, del sonido de las gotas de lluvia al suspenderse al suelo. El ballet es mi vida, desde los 6 años tome mis primeras clases, desde luego se transformo en mi pasión. No tengo muchos amigos. No puedo decir que soy feliz, pero tampoco que soy infeliz. Sin embargo, me pregunto qué me hace falta para alcanzar la felicidad. Luego de preguntarme eso, creo que fue un error, y miro hacia la ventana con un aire de desesperanza. Prefiero contemplar el paisaje que me ofrece ese día, antes de tomar el bus para ir al colegio. Tuve una infancia normal, al menos eso creo. Jugaba con mis …ver más…

Mi vida es así, está es la realidad.
(Termino de su monologo) Comienzo de la historia*****

Capítulo 2:
Escuche que le dieron unas palmaditas a la puerta de mi habitación, acompañada de la voz dulce de mi madre:
-Hija, creo que tu despertador no sonó a tiempo.
Rápidamente me apresuro, y me dirijo al baño. Sin notar antes, si me pare con el pie derecho o el izquierdo, me tropiezo con un taco de madera que dejo mi sobrino tirado, hace dos días en mi habitación. Logro levantarme rápidamente, evitando que me gane el mal humor, suelto una carcajada por lo ocurrido.
Me duche, salgo casi corriendo del baño. Abro mi closet, me limito a buscar mucho, tomo el primer top y jeans que consigo. Me demoro 5 min en ponerme esto. Tomo rápidamente mis zapatos, alcanzo a estirar la mano y tomar mi bolsa.
Bajo rápidamente las escaleras, llego a la cocina.
-Te prepare algunas frutas. No sé si quieras cereal, o tostadas con mermelada. –Dijo mi madre
-Supongo que comeré lo más fácil y rápido. Tomare las frutas mama.
-Ok, te buscare unas galletas por si quieres merendar algo luego- dijo ella
-Está bien. Y donde esta cassie?.
-Te está esperando afuera. Apresúrate. Tomas tus galletas. Cuídate, suerte hija. –dijo mama
Salí apresurada, voltee para mover mi mano como forma de despedida, y con algo de fruta dije: <<Hasta luego mama.
Al salir de casa, mi hermana me decía que me apresurara, que solo quedaban 10 min para llegar al colegio. Generalmente