Cambio social de mexico
“Yo creo que no hay una pauta que uno pueda poner de su vida al margen de la de los demás. La vida es una transacción con otros. La vida es un gesto social con otros”. (Fernando Savater)
Educamos erróneamente para vivir en sociedad Hay niños que cometen hechos deleznables que no lo hacen por odio sino por carencia de ajuste social, por estar huérfanos de valores, de criterios, por adolecer de evolución moral. Niños famélicos que socialmente han padecido una dieta donde se les ha suministrado derecho a exigir, a dictar, a ser individualistas, a centrarse en sus intereses y se ha olvidado de administrarles el derecho a ser condescendientes y generosos, a saber esperar, ser tolerantes y …ver más…
Habrá de predicarse con el ejemplo en tantas situaciones cotidianas (respetar al desvalido, no colarse en los espectáculos, cumplir las normas) y explicar lo que está mal, razonar el por qué no se debe de hacer. Si nos reímos cuando un viejecito tropieza y se cae ¿qué esperamos? Permitir a un hijo que moleste a las personas de su entorno o reírle sus palabrotas y bromas pesadas es una buena manera de viciar su educación. Los valores cívicos arrancan con el respeto al prójimo. Tenemos que erradicar la crueldad con los animales, la saña, hemos de hacer ver el sufrimiento de otras especies, de las plantas. Aprovechemos las noticias para realizar valoraciones éticas. Expliquemos nuestras conductas de adultos y comprometámonos éticamente con nuestros hijos.
Educar en la igualdad Hay que desarrollar el aprendizaje afectivo. Como en todo es en la educación en los primeros momentos de la vida de los niños y sobre todo en el aprendizaje vicario, el modelaje, el ejemplo que vean, donde niños y niñas han de comprender lo que nos diferencia, pero siempre desde la igualdad en los derechos. No esta mal que niños y niñas jueguen con muñecos y muñecas, para ir adiestrándose en el hábito del cuidado de los demás. Y desde el juego, no hemos de cercenar las posibilidades de desarrollo de niños y niñas, ni intentar doblegar sus tendencias y querencias. Lo cual no impide que desde el respeto a las diferencias,