Entras por el estudio de Cesare Lombroso, es un cuarto lleno de cráneos humanos, cerebros en formol e instrumentos que podrían parecer de tortura; es el estudio de uno de los primeros criminólogos. Continuas el recorrido y te encuentras con un viejito con la mirada perdida. Parece algo amigable, hasta que te enteras que es Albert Fish, mejor conocido como el Vampiro de Brooklyn, uno asesino serial que disfrutaba torturar a sus víctimas, normalmente niñas, y comérselas.
Avanzas y te encuentras a un joven preparándose la cena; es una escena aterradora, pues está preparando una mano humana y en el refrigerador se pueden ver varias cabezas y falos esperando a ser devorados. Es la casa deJeffrey Dahmer, el Descuartizador de Milwaukee, uno de