AUYAMA
Existe suficiente evidencia arqueológica para considerar que las cucurbitáceas comenzaron a cultivarse por primera vez, de manera sistemática, en Mesoamérica, en la zona que corresponde a los estados de Puebla, Oaxaca y el Estado de México.2 3 Su cultivo también se practicó en épocas prehispánicas en prácticamente todo el resto de Mesoamérica, en la trilogía milpera, junto con el maíz y el frijol, conocida a veces como "las Tres Hermanas". También se conoció y se cultivó en otras culturas americanas, como en el caso del Perú, donde se ha encontrado cerámica Mochica con representación del zapallo. Más tarde, a partir del siglo XVI, se llevó a Europa, Asia y África. La calabaza y el calabacin son muy ricos en sales …ver más…
Puede sembrarse en semillero protegido si se desea adelantar el cultivo, trasplantando después cuando las matitas tengan dos o tres hojas, o progresivamente hasta el comienzo del verano. En el caso de las calabazas de época fría se pueden sembrar directamente en tierra durante la primavera.
La plantación, sea por semilla o trasplantando las plantitas desde el semillero, se realiza enterrando dos o tres pepitas juntas en cada hueco, separados unos dos metros para prevenir el posterior desarrollo; si la variedad es para producir calabacín se siembra en bancales; algunas variedades de calabacín son trepadoras y requieren tutores. El suelo debe ser casi neutro (añadir cal si es ácido), fresco, profundo, estar muy bien estercolado, y poseer un buen drenaje. La exposición debe ser soleada y al resguardo del viento. Es importante realizar riegos y escardados frecuentes.
En aquellas plantas de calabaza de gran desarrollo sarmentoso, cuando deseemos obtener muchos frutos pequeños, en vez de unos pocos y muy grandes, se puede utilizar la técnica del pinzado. Consiste en dejar que la planta emita flores masculinas, pinzando todas las ramas que contengan flores femeninas dejando sólo dos hojas por encima. Si por el contrario se eliminan las flores masculinas y las ramas que las producen se obtienen frutos más grandes. Es fácil distinguir las flores masculinas de las femeninas; ésta últimas poseen una diminuta calabacita, que