- Ser y devenir del pensamiento y la
obra de Lezama Lima. - Filosofía y Literatura.
Comunidad, interacción y
condicionamiento. - Especificidad del Universo
poético lezamiano. - Paradiso: una obra
universal.
José Lezama Lima (1910-1976) constituye una de
las figuras más relevantes de las letras de
Hispanoamérica, del siglo XX. Hombre de
vasta cultura,
singular talento y aguda sensibilidad, desarrolló una
extensa obrar poética que si bien refleja lo mejor de la
cultura universal, le es inmanente el sello propio de su
creación. En su concepción, " cuando se llega a
sentir la influencia de la cultura universal, ya no hay
influencias". Sencillamente, para el gran intelectual cubano, su
cosmos poético se funda en premisas reales: "Por la
imagen
el hombre
recupera su naturaleza, vence
el destierro, adquiere la unidad como núcleo resistente
entre lo que asciende hasta la forma y desciende a las
profundidades (….). La imagen y su absoluto , y la
metáfora en su libertad que
avanza trazando su análogo, engendran la poesía
como absoluto de la libertad. En esa libertad transcurre mi
obra(…).
Este es su credo filosófico-poético o
poético-filosófico, en su visión de
sì mismo, pues según él "(…) su
motor es
esencialmente poético. Algunos ingenios enfatiza Lezama-
aterrorizado por la palabra sistema, han
creído que mi sistema es un estudio filosófico ad
usum sobre la poesía. Nada más lejos de lo que
pretendo. He partido siempre de los elementos propios de la
poesía, o sea, del poema, del poeta, de la
metáfora, de la imagen"
Se trata de un pensamiento
poético, de una cosmología poética que hace
poesía sobre la base de una rica cosmovisión
filosófica, donde literatura y filosofía se
integran en unidad, para desplegarse en un discurso que
ve con las palabras, habla con los colores y anima
lo inerte con alto vuelo cogitativo y siempre sugiriendo
múltiples lecturas y aprehensiones.
I. Ser y devenir del
pensamiento y la obra de Lezama Lima.
" Para conocer y asimilar su universo
poético – se refiere, por su puesto a Lezama- debemos
conocer su universo cotidiano. Porque Lezama es la reiterada
presencia del impulso familiar y doméstico: en esencia del
impulso materno."
Esta tesis resulta
interesante y más aún cuando se trata de una
visión de un amigo de Lezama, de un profundo conocedor de
su vida y su obra.
Pasemos a exponer algunos momentos que son hitos de su
ser y devenir.
José María Andrés Fernando
nació en el Campamento de Columbia, Marianao, el 19de
diciembre de 1910.
Su padre, José María Lezama y Rodda,
coronel de artillería de la elite castrense que se
formó en la República mediatizada.
Su madre, Rosa Lima y Rosado, era hija de imigrados
cubanos revolucionarios que se formó en los Estados Unidos.
Su familia se
arruinó en el exilio colaborando con la causa
independentista cubana.
El nacimiento de Lezama coincide con el traslado de
la familia a
la Fortaleza de la Cabaña y el nombramiento de su padre
como director de la Academia Militar del Morro.
Sus primeros años están ligados
estrechamente con la disciplina. "
Sus juegos tienen
como escenario la explanada donde las tropas realizan maniobras
bajo las órdenes de su padre.
Sin embargo,- continúa Armando Alvarez- él
no guarda un recuerdo áspero de este tiempo. El cuadro
familiar, según dice, era muy risueño. La fe en el
futuro era la divisa, y las imágenes
que captaba componían una grata secuencia. Uniformes de
Gala, Caballos, desfiles, viajes al
extranjero, fiestas, llenaban su imaginación perfilando
ilimitadas posibilidades. Pero este mundo encantado no
duraría mucho. Con motivo de la Primera Guerra
Mundial, su padre se ofrece como voluntario para servir a las
tropas aliadas (…), el 19 de enero de 1919, encuentra
la muerte
(…) Cuatro meses después nace su hermana
menor.
Este golpe inesperado pone fin a lo que parecía
no tenerlo. Todavía niño, Lezama ve comenzar una
vida distinta y, en su fuero interno resiste a aceptarla. No se
explica la ausencia del padre. No comprende cómo la mesa
siempre colmada ha quedado desierta. Cómo la madre apenas
se alimenta y pasa largas horas contemplando un descomunal
retrato. Cómo cambia sus trajes. Cómo su
conversación no progresa, sino que se vuelve e indaga.
Cómo una invisible presencia parece rondar los
contornos
- La familia se traslada a Prado 9, casa de la abuela
materna. La salud de Lezama empeora,
el asma que padece desde los 6 meses se recrudece. Permanece
largas temporadas en la cama. No participa de los juegos
infantiles por su precaria salud. Dos grandes momentos que
dejarían hondos influencias tienen lugar: estrecho
contacto con su adorable madre e inicio de las
lecturas.
1920. Ingresa en el colegio Mimó y lee el
Quijote. "Este libro– a pesar
de sus
pocos años- le impresiona profundamente y le hace
intuir que en la
literatura existe una realidad ajena al tiempo y a la
circunstancia. Pasan
cinco años y termina sus estudios
primarios".
- Ingresa en el Instituto de La Habana. Se inclina por
las letras, pero en homenaje secreto a su padre ingeniero,
asume con fuerza y
ahinco el estudio de Algebra, Matemáticas, Geometría.
- . Se gradúa de bachiller y tiene lugar un
nuevo cambio de
perspectivas cuya
influencia será decisiva en su vida.
- La familia abandona la casa de la abuela y se
traslada a Trocadero 162. La vida doméstica,
coincidiendo con la realidad nacional. (década critica),
tiene un nuevo estilo de vida (..) "El desahogo se sustituye
por una ceñida pensión, que obliga a Rosa Lima a
hacerse fuerte en su prudencia para sostener la casa y educar a
los hijos.
Es en este año 29 cuando se inicia la fusión del
poeta con su madre. Fusión que cristalizaría,
haciéndose total, envolvente a la vuelta de unos
años, cuando ambos quedan solos en la casa. No es
aventurado proponer que el Lezama que se encuentra entre nosotros
nace en este momento. Y nace, porque medita mucho: entendiendo
que la muerte de su
padre determinó su entrada al mundo de la imagen, que no
es un mundo de superficiales contactos sino de profundas
entregas. Un mundo que únicamente se aprende a
través de la absoluta conciencia de las
experiencias vitales y las lecturas, de la formación
integral. Las presiones económicas impiden al poeta
dedicarse de lleno a esa formación. Su tiempo debe
dividirse entre ella y sus estudios de leyes;
llevándole su presencia en la universidad a la
necesaria ", contra el status que existe.
Más tarde diría sobre su
participación en la protesta del 30 de septiembre de 1930:
"Ningún honor ya prefiero al que me gané para
siempre en la mañana del 30 de septiembre de 1930…
Al lado de la muerte, en un parque que parecía rendirle
culto a la sombra Proserpina, surgió la historia de la infinita
posibilidad en la era republicana".
Es clausurada la Universidad. No hay posibilidades de
trabajo, de estudio. Lezama se sumerge en los libros.
Encuentra el equilibrio en
las ansias de sabiduría. Estudia los clásicos y
contemporáneos. Le apasionan Góngora y los
gongorinos. "También los franceses cercanos en el
calendario, determinan su visión, su toma de conciencia.
El hermético Mallarmé, el racionalista
Valéry, el atormentado Rimbaud, el detonante Lautremont y
ese poeta descomunal, Marcel Proust, desatan un torbellino de
inquietudes que se traducen en una labor que no vacila ante las
incorporaciones, porque se sirve de ellas para mostrar un
ámbito propio".
1932. Conoce a un joven poeta que se prepara para
sacerdote, Angel Gaztelu, y lo dirige a los estudios
teológicos que combinará con los históricos
(…) y con
los textos más conspicuos del misticismo
oriental.
Esta etapa, insaciable devoradora de libros se
interrumpe con la caída del tirano Machado y el reinicio
de la universidad. "En él se ha operado un cambio. Ha
comprendido que no es un hombre de acción; y, aunque se
siente orgulloso de su ejecutoria, ve que su verdadero mundo es
el de la cultura".
1936. Llega a Cuba Juan
Ramón
Jiménez. Un momento capital en su
trayectoria intelectual. Lezama, redacta un "Coloquio con Juan
Ramón Jiménez (1837)
donde se plantean los temas del insularismo y la
peculiar sensibilidad de las islas. Al coloquio le
continúa una revista
universitaria, Verbum, alrededor de
la cual empieza a cohesionarse un grupo(Gaztelu,
Lozano, Vitier,Porcarrero y Mariano) que devendrán figuras
excelsas de la cultura cubana.
1937. En la Universidad publica " Muerte de Narciso, una
verdadera joya de la Poesía que apunta al poeta
creador.
Dánae teje el tiempo dorado por el
Nilo,
Hasta su última y alucinante
estrofa:
Si atraviesa el espejo hierven las aguas que
agitan
el oído.
Si se sienta en su borde o en su frente el
centurión pulsa en su costado.
Si declama penetran en la mirada y se
fruncen
las letras en el sueño.
Ola de aire envuelve
secreto albino, piel
arponeada
que coloreado espejo sombra es del recuerdo
y
minuto del silencio.
Ya traspasa blancura recto sinfín en llamas
secas y
Hojas lloviznadas.
Chorro de abejas increadas muerden la estela,
pídenle
el costado.
Así el espejo averiguó callado,
así Narciso en pleamar
Fugó sin alas.
En "Muerte de Narciso", las varias ciencias
filosóficas y humanistas aparecen en un solo haz. La
cosmovisión del poeta vincula con maestría y en una
sola pieza, filosofía y literatura. Es una síntesis
que expresa las múltiples indagaciones poéticas y
filosóficas y anticipa lo por venir en el grande
poeta.
- Culmina su carrera de Derecho en la Universidad de La
Habana y comienza a trabajar en un bufete. Pero su camino en la
cultura, y en la literatura en particular no será
abandonado jamás. Edita la Revista Espuela de Plata, que
a diferencia de Verbum, se dedica íntegramente a la
Literatura. En ella( se publicaron 6 números) aparecen
los contenidos más sobresaliente del momento en Europa,
así como su resonancia en los escritos de los miembros
de su consejo de redacción.
1940. Abandona el bufete. Su misión no
congenia con el oficio. Pasa a trabajar en el Consejo Superior de
Defensa Social, en el Castillo del Príncipe, por muchos
años.
- Cuatro años después de la "muerte de
Narciso", reúne sus poemas en un
libro que lo consagra como poeta: Enemigo Rumor. ¿ Por
qué ese título? ¿Por qué no,
sòlo, Rumor? El lo explica en carta a su
amigo, y nuestro grande poeta y ensayista martiano,
Cintìo Vitier: "Se convierte a sí misma, la
poesía, en una sustancia tan real, tan devoradora,
-enfatiza Lezama en su concepción de la poesía-
que la encontramos en todas las presencias. Y no es el flotar,
no es la poesía en la luz
impresionista, sino la realización de un cuerpo que se
constituye en enemigo y desde allá nos mira. Pero cada
paso dentro de esa enemistad, provoca estela o comunicación inefable".
Sirven estas palabras para inaugurar la lectura del
primer poema de Enemigo rumor: Ah, que tú escapes. En
él se aprecia cómo los conceptos de la carta se
fundamentan clarificando. Con sólo tomar los dos primeros
versos:
Ah, que tú escapes en el instante
en el que ya habías alcanzado tu
definición mejor
el lector se da cuenta que en ellos se establece un
distanciamiento entre el poeta y la sustancia poética. Si
tomamos dos de los últimos:
Ah, mi amiga, sí en el puro mármol de los
adioses
hubieras dejado la estatua que nos podía
acompañar.
vemos como Lezama, el poeta, ve que siempre tiene que ir
en busca de algo conocido fugazmente y no esperar que ese algo
venga a él. Ese algo, el enemigo rumor, lo que escapa, la
poesía que engendra la poseía en el
hacer.
Esta búsqueda de otro espacio para una realidad
continúa en Una oscura pradera me convida. La pradera
representa la lejana zona poética donde se ven:
………
…………………..ilustres
restos
cien cabezas, cornetas, mil funciones abren
su
cielo, su girasol callando.
Como es de esperarse, este incesante ir plantea una
desazón en el corazón
del poeta. ¿No quedará solo cuando le falten las
fuerzas? La pregunta surge en los Sonetos a la Virgen:
¿Y si al morir no nos acuden alas?
Y encuentra su respuesta en lo
religioso:
Pero sí acudirás; allí te
veo,
ola tras ola, manto dominado
que viene a invitarme a lo que creo:
mi Paraíso y tu Verbo, el encarnado.
Es significativo cómo la noción de ser
salvado –fundamental en Lezama- no se manifiesta en esta
bella estrofa como una cosa simple; sino que la unidad se tiene
que integrar basada en dos factores: su Paraíso (el
poético) y el Verbo encarnado (lo religioso).
Más adelante, en Noche insular: jardines
invisibles, nos acercamos a Lezama en cubano. Sirviéndose
de un hecho cotidiano, nuestra noche, el poeta, trazando una
fiesta, ironiza sutilmente. Característica esta que vemos casi como una
constante en su obra. Pero este ironizar no es violento, sino
doloroso. Se percibe una secreta angustia, un sentirse
desarraigado y a la vez presente. Lo evidente se transforma por
la imaginación y al llegar a un punto insostenible busca
la redención por la luz, el día. El irónico
se sosiega y se llena de esperanza, aunque en su interior
todavía se mueva la angustia.
Se cierra Enemigo rumor con un tour de force: Un puente.
Un gran puente. Este poema es una de las más violentas
confesiones de nuestra literatura. El poeta reconoce todo lo que
le rodea, todo lo que convive con él: analiza sus
sueños, su figura que desea el reposo que sin embargo le
niega su propia imaginación. Y, a través de todo
este aquelarre poblado por seres reales, tanto más
terribles por su condición, acata su destino y se dispone
a seguir su camino atravesando el puente, dispuesto a
morir
……………………………………..
como el rey
que ignora que ha sido destronado
y muere cosido suavemente a la fidelidad
nocturna.
1942. Edita con su amigo Gaztelu diez números de
una revista enteramente poético "Nadie parecía",
donde lo religioso y la aprehensión de los clásicos
es visible con facilidad.
Según Armando Alvarez, " terminado el año
43, Lezama se siente seguro, firme; se
siente el poeta. A esto ha contribuido en gran parte la figura de
la madre, que ante todos los contratiempos le ha acicateado,
obligándolo a seguir adelante. Para Lezama no hacerlo
significa traicionarla. Y el poeta se pone en marcha"
Revista "Orígenes" (1944-1954) Alrededor de
Lezama se une un grupo destacado de jóvenes con
profundas inquietudes literarias. Colaboranimportantes escritores extranjeros. Orígenes
poseía personalidad propia y vigencia
internacional.- Año cumbre en el ser y devenir lezamiano. Se
inicia la publicación de la - Además de la dirección de Orígenes, con
José Rodríguez Feo, comienza a trabajar en la
Dirección de Cultura, y publica "Aventuras sigilosas",
trabajo que prefigura el cosmos de Paradiso.
La etapa comprendida entre la edición de
"Aventuras sigilosas(1945) y de "La fijeza" (1949) es
fructífica y fecunda en trabajo y meditaciones. Pronuncia
conferencias, ensancha sus contactos y relaciones y la siempre
presencia de su madre y sus recuerdos.
- Viaja a México. Extiende su visión en
tierra
firme, con el paisaje americano, amplía sus conceptos
sobre esta realidad, pues solo conocía las
islas. Publica La fijeza, que es una prolongación de
Enemigo rumor y otros trabajos que muestran vuelo de altura y
virtuosismo en la escritura.- Viaje breve a Jamaica. Empieza a fraguar una teoría sobre la expresión
americana: Escribe además la monografía Arístides
Fernández, que clarifican las motivaciones de la obra
del joven y malogrado pintor.
1953. Reúne sus ensayos y
trabajos breves en un libro titulado "Analecta del reloj".
Aquí aparecen las imágenes posibles, que forma
parte de la exposición
del sistema poético.
Antes de 1954 publica en Orígenes los primeros
cinco capítulos de su obra capital: Paradiso, novela donde el
autor ha querido crear un cosmos, en cuyo texto tienen
mayor valor los
elementos imaginarios que los reales por el impulso que
desarrollan. Se escribe cuando se encuentra solo con su madre y
se propone fundar las bases de su sistema
poético.
1954. Orígenes deja de publicarse por desacuerdo
entre los editores. Tres años de silencio en la
trayectoria lezamiana, trabajando en su sistema
poético.
1957. Se publica "La expresión americana", con
una visión señorial de nuestro mundo a
través de una mirada que todo lo ve distante y que,
regocijàndose en la proliferación sensual, barroca,
parte de una exuberante grandeza propia y encuentra su destino en
la tábula rasa de la grandeza universal, aunque sus
manifestaciones están teñidas de enrevesados juegos
y triquiñuelas. La primera línea de La
expresión nos da el sentido de lo americano al postular:
sólo lo difícil es estimulante. Es la dificultad
para llegar a las esencias de ese mundo, su secreto, su
atractivo, acaso, su razón de ser.
1958. Aparece su segundo libro de ensayos: Tratados en La
Habana.
1959. Al triunfo de la Revolución. Lezama ocupa la
dirección del Dpto. de
Literatura y publicaciones del Consejo Nacional de
Cultura.
1960. Aparece el libro Dador. Sólo comprensible
para el que posea una previa asimilación del sistema
poético lezamiano. Aquí el poeta en el umbral de
su
madurez, toma la posición de un espectador y
contempla la vida como un gran ballet. Dador es un gran repaso a
lo vivido. Un repaso necesario antes de acometer la obra
definitiva.
En el período de 1959- 1962, el gran poeta ocupa
el cargo de uno de los seis vicepresidentes del Unión de
Artistas y Escritores de Cuba y pasa a trabajar como Asesor, en
el Centro Cubano de Investigaciones
Literarias.
- El 12 de septiembre de 1964. Lezama sufre una
pérdida irreparable: la muerte de su madre. - 1966 Aparece la primera edición completa de su
obra maestra: Paradiso
II.-
Filosofía y Literatura. Comunidad,
interacción y condicionamiento.
A través de la historia espiritual de la
civilización humana la filosofía y la literatura
han tenido campos comunes de interacción y
condicionamiento.
Tres rasgos comunes sobresalen:
- La existencia de ideas limítrofes de carácter
cosmovisivos entre la filosofía y la literatura, en
tanto refieren al hombre en relación con el mundo o al
cosmos humano en sus múltiples mediaciones. - La no limitación de la filosofía al
conocimiento
teòrico-científico, pues incluye formas
práctico-espirituales de aprehensión de la
realidad. - El uso por la filosofía de medios
expresivos no sólo lógicos, sino también
imágenes, metáforas, símbolos,
alegorías, mitos
etc.
El propio Lezama Lima considera, además que "el
estudio de la literatura debe rebasar las fuentes de
información estrictamente literarias.
En la concepción de Santayana también
está el criterio de unidad entre la filosofía y la
literatura. "Los razonamientos e investigaciones de la
filosofía son laboriosos; sólo de un modo
artificial y con escaso donaire puede la poesía vincularse
a ello. Pero la visión de la filosofía es sublime.
El orden que revela en el mundo es algo hermoso, trágico,
emocionante, es justamente lo que, en mayor o menor
proporción, se esfuerzan todos los poetas en
alcanzar".
No es posible concebir la filosofía sólo
como sistema teóricamente elaborado, cuyo discurso se
opere a través de conceptos lógicos, al igual que a
la literatura como simple aprehensión subjetiva expresadas
en imágenes. Tanto la filosofía como la literatura
aprehende la realidad en su esencialidad en correspondencia con
su objeto, y emplean las múltiples formas aprehensivas de
que dispone el hombre. Por eso existe comunidad,
interacción y condicionamientos mutuos. Los conceptos, las
ideas, las imágenes, etc. son formas humanas de
asimilación de la realidad y no son privativos de una
ciencia
específica.
Una filosofía que se aferre sólo a los
tratados sistemáticos y a las expresiones categoriales y
una literatura que no admita las contaminaciones
filosóficas resultan estériles. " Toda obra
poética que realmente merezca el nombre, tiene algo de
filosófica. En los orígenes del filosofar, la
poesía, tan antigua como el hombre, prestó su forma
a la naciente reflexión sobre el universo para
plasmar la búsqueda del argé o la
aletheia.
Las primitivas cosmogonías, poemas de alta
condición, se encuentran preñadas de ideas
cosmovisivas destinadas a fructificar en órdenes muy
diversos, pero, sobre todo, a constituirse en fuentes
inmediatas de la filosofía. Esto nunca ha dejado de
ocurrir".
La historia de la
filosofía y la historia de la literatura, dan cuenta
de la comunidad interactiva entre ambas disciplinas y las
particularidades expresivas de los literatos filósofos y los filósofos
literatos.
En Lezama Lima, todo su universo poético da
cuenta de ello. Lo mismo pudiera decirse de Martí y
Carpentier . Es que en todo creador con sólida base
cultural, literatura y filosofía se presuponen , comunican
y superan para expresar un discurso crítico de fuertes
raíces, espiritu ecuménico y vuelo
cogitativo.
III.
Especificidad del universo poético
lezamiano.
Un profundo universo poético contiene la obra de
Lezama Lima. Un rico sistema que hace gala de erudición
enciclopédica y subjetividad humana. Un discurso
subjetivo, pleno de humanidad que parte de las raíces con
vocación ecuménica para penetrar con éxito
en el hombre en relación con el mundo y la sociedad. Su
quehacer poético-filosófico hace de la imagen y la
metáfora sustancia proteica de la poesía con cauce
de honda aprehensión.
"En los términos de mi sistema poético del
mundo, la metáfora y la imagen tienen tanto de carnalidad,
pulpa dentro del propio poema, como de eficacia
filosófica, mundo exterior o razón en sí. Es
uno de los misterios de la poesía la relación que
hay entre el análogo, o fuerza conectiva de la
metáforas, que avanza creando lo que pudiéramos
llamar el territorio substantivo de la poesía, con el
final de este avance, a través de infinitas
analogía, hasta donde se encuentra la imagen, que tiene
una poderosa fuerza regresiva, capaz de cubrir esa
substantividad. La relación entre la metáfora y la
imagen se puede establecer con un caballo tan alado como nadante
que persiste en una sustancia resistente que en definitiva
podemos considerar como la imagen. La imagen es la realidad del
mundo invisible. Así los griegos colocaban las
imágenes como pobladoras del mundo de los muertos. Yo creo
que la maravilla del poema es que llega a crear un cuerpo, una
sustancia resistente enclavada entre una metáfora, que
avanza creando infinitas conexiones, y una imagen final que
asegura la pervivencia de esa sustancia, de esa poiesis. De la
misma manera que el hombre ha creado la orquesta, la batalla, los
soldados durmiendo a la sombra de las empalizadas, la gran
armada, el caserío del estómago de la ballena, ha
creado también un cuerpo artificial que resulta
acariciable y existente, como la misma naturaleza
escondiéndose al tacto. En alguna ocasión he hecho
referencia, hablando de Martí y tratando de establecer las
misteriosas leyes de la poesía (y no se olvide que las
primeras leyes se hicieron en forma poética), que para
esas prodigiosas leyes de la imaginación, veinte
años de ausencia equivalen a un remolino en la muerte;
así como, dentro de la orquesta, una trompeta equivale a
veinte violines. Las conexiones de la metáfora son
progresivas e infinitas. El cubrefuego que la imagen forma sobre
la sustantividad poética es unitivo y fijo como una
estrella. Por eso afirmo en uno de mis poemas, paradoja profunda
de la poesía, que el amor no se
ejerce caricioso, poro tras poro, sino de poro a estrella, donde
el espacio forma una suspensión y el cuerpo se lanza a una
natación
que se prolonga"
En su sistema poético se opone a la
concepción heideggeriana del hombre para la muerte,
"levantando el concepto de la
poesía que viene a establecer la causalidad prodigiosa del
ser para la resurrección, el ser que vence a la muerte y a
lo saturniano. De tal manera que si me pidera que definiera la
poesía, una coyuntura casi desesperada para mí, –
enfatiza Lezama- tendría que hacerlo en los
términos de que es la imagen alcanzada por el hombre de la
resurrección".
En su sistema poético trata de destruir la
casualidad aristotélica en función de
la búsqueda y encuentro de lo incondicionado
poético, de la imaginación creadora. Al mismo
tiempo cree posible "hablar de caminos poéticos o metodología poética dentro de ese
incondicionado que forma la poesía. Para ello se remite a
la historia e ilustra con ejemplos.
Considera que todo hombre cree en algo, pues
según él, hasta el propio "Valéry que hizo
profesión de ateísmo , cuando definió la
poesía, lo hizo diciendo que era el paraíso del
lenguaje. Ya
ve usted –destaca Lezama- el caso de un ateo usando la
palabra paraíso con toda la resonancia de un
católico ".
Ante una pregunta sobre la inexistencia del alma, si
bien la afirma en su sistema, el poeta muestra tolerancia.
"Amigo mío,- responde Lezama- siempre he creído que
mi sistema poético es algo bello en sí: pero nunca
he tenido la soberbia de pensar que es algo único. Sobre
él, sitúo a la poesía. La poesía como
misterio clarísimo o, si usted quiere, como claridad
misteriosa. Esa ambigüedad me permite decirle que no soy
quien debe responder esa pregunta, sino el tiempo, el tiempo que
hace poesía y la poesía que hace en el
tiempo.
En el sistema poético lezaminano, imagen,
mito y
poesía integran una totalidad integradora del discurso
aprehensivo de la realidad. "Después que la poseía
y el poema ha formado un cuerpo o un ente, y armado de la
metáfora y la imagen, y formado la imagen, el
símbolo y el mito -y la metáfora que puede
reproducir en figuras sus fragmentos o metamorfosis-, nos damos
cuenta que se ha integrado, una de las más poderosas
redes que el
hombre posee para atrapar lo fugaz y para el animismo de lo
inerte". Lo mismo ocurre con el juego que
forma en su sistema un sentido cósmico y preside todo el
devenir universal hacia la unidad.
La relación hombre-cosmos en sus diversas
manifestaciones está presente en toda la obra
poética de Lezama Lima. En su esencia se traduce en una
cosmología poética, extremadamente enrevesada y
difícil de comprender para algunos. Pero esto no le
preocupa al poeta. Sencillamente, afirma: "Hay la poesía
oscura y la poesía clara (…), en definitiva ni las
cosas oscuras lo son tanto como para darnos horror, ni las claras
tan evidentes para hacernos dormir tranquilos. Lo que cuenta
–aquí sigue a Pascal (…)
es el eterno reverso enigmático, tanto de lo oscuro o
lejano como de lo claro o cercano. La tendencia a la oscuridad, a
resolver enigmas, a cumplimentar juegos entrecruzados es tan
propia del género
humano como la imagen reflejada en la clara lámina marina,
que puede conducirnos con egoísta voluptuosidad a un golpe
final, a la muerte. No hay que buscar oscuridades donde no
existen" .
Lezama revela en lo poético, con todos los medios
y formas de expresarse , un modo de perenne ascensión,
propio de un logos profundo que se aprehende a través de
dos vías esenciales: doxa y ciencia y cuyo resultado
encarna el sentido cósmico, o el cosmos mismo. Así,
en Muerte de Narciso, " el mito que le sirve de base, la
contemplación de la propia belleza que consume a su
protagonista, permite establecer una especial relación
cognoscitiva entre hombre y universo, dirigida al sentido
cósmico de la unidad entre ambas"
En esta misma dirección podría analizarse
su teleología insular estrechamente vinculada a lo
cósmico universal, el problema de la muerte, el tiempo y
el espacio, la historia en fin, el hombre en relación con
el mundo en sus varios avatares.
En todo su sistema poético y el discurso que lo
expresa, filosofía y literatura aparecen mancomunados como
un crisol unitario en pos de lo grande y absoluto y con la
convicción que el conocer como forma del servicio, es
la caridad entrando como una nueva categoría en todo
filosofar" .
IV. Paradiso: una
obra universal.
La primera edición de Paradiso aparece en 1966.
Es una obra maestra de quilate universal que muestra la madurez
de un autor en cuanto a profesionalidad, estilo, originalidad
creadora, maestría filosófico –literaria y
posesión de una vasta cultura.
No se trata de una novela épica. Es una novela
poética, cuyos antecedentes están en la propia
poesía de Lezama. En prosa resume su cosmos
poético, estrechamente vinculado a su concepción
del mundo, y a su visión del hombre en su formación
y despliegue, en sus orígenes; en su pasado. "En Paradiso
no se busca lo histórico concreto. Se
busca recrear el pasado; pero siempre a través del
recuerdo, de esa memoria afectiva
que es la que guía el orden en que aparecen estructuradas
las vivencias y recursos del
autor". Su personaje central –protagónico-
José Cemí – encarna la búsqueda
lezamiana. "José Cemí no es más que un poeta
que busca la verdad.- podríamos decir, la sabiduría
a través de la poesía, en tanto libertad absoluta-
.Y Paradiso es la historia de ese personaje, y de su familia, y
de sus amigos, y de las solicitaciones que le hace la realidad",
de sus aprehensiones sensoriales, sentimentales y ancestrales que
le trasmite su madre y el destino que le ha fijado: Tu destino es
contar la historia de tu familia".
La novela no soslaya totalmente la historia, pero no la
asume de frente. Aparece sólo en aquellos que tiene que
ver con el aprendizaje
vital", es decir, poético, a través de recuerdos,
imágenes. Los motivos históricos se subordinan a
ello. "Sencillamente, hay otro sentido de lo histórico,
que viene dado a través de la asimilación subjetiva
del mismo.
Busca la expresión de la cubanía desde
dentro: la familia, las tradiciones, las costumbres y los
sentimientos" . Cemí lo asimila, se encuentra, a
través de un mundo real e imaginario. Así asume el
sentido de la vida, de la muerte, del destino, del deber, como
experiencias vividas o trasmitidas por su madre y los recuerdos e
imágenes.
Para Cintio Vitier –amigo de Lezama- "Paradiso es
una invitación a la sabiduría". Una novela
útil y trascendente por su contenido y riquezas expresiva
y poética, "la historia imaginaria de la formación
de un poeta que quiere alcanzar o merecer la sabiduría. Su
intención es a la vez testimonial, catártica y
pedagógica". El resultado, una pieza filosófica
literaria, permeada de humanidad que sigue un cauce con sentido
cultural antropológico en pos de trascendencia y
universalidad.
Por eso y mucho más, coincidimos con Dolores
Nieves, cuando afirma " Hace años, Cintio Vitier, al
referirse a la poesía de Lezama, dijo: "Si aquello no se
resolvía en un caos, tenía que engendrar un mundo".
Y esto es realmente lo que ocurrió. Un mundo exuberante y
complejo es la poesía de Lezama. Y como remate de ella, un
mundo complejo, difícil, a veces desconcertante, pero
siempre incitante es Paradiso, que se ha ganado ya, por derecho
propio, un lugar entre las más importantes novelas cubanas
de todos tiempos" ¿y por qué no, un lugar entre la
novelística universal?.
Dr. Rigoberto Pupo Pupo