LUIS NISHIZAWA…………
EL HOMBRE, EL ARTISTA
Por Sandra García

Trazos elocuentes, líneas que se conjugan para mostrar una fracción de la realidad donde cabe la reflexión profunda pero sobre todo que penetra en el ser humano y provoca en él una imperiosa necesidad de encontrarse espiritualmente. Creaciones hechas para ser exploradas en toda su esencia, las cuales al mismo tiempo rompen con los paradigmas establecidos.
Así son las obras del artista mexicano - japonés Luis Nishizawa Flores, quien recientemente fuera objeto de un homenaje por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México, a través de su Facultad de Estudios Superiores Acatlán con motivo de la celebración de sus 90 años de vida. La exposición denominada “Las vacas …ver más…

Las formas, siluetas y sombras dan pie a recrear en la mente no sólo un ambiente; en realidad caben todas las explicaciones posibles, ya que en el arte nada es absoluto. Caballos, Fragmento.

Ser humano introvertido y solitario, hace gala de su magnífica técnica al representar plantas, árboles, volcanes, animales; en una palabra paisajes que ponen de manifiesto la cercanía con sus raíces. La herencia de dos pueblos tradicionalistas pero a la vez artísticos como lo son México y Japón, ha influido fuertemente en sus dibujos, de tal manera que ha plasmado los matices de ambos pueblos. Y aunque ha declarado que en ninguna de sus obras intenta ser más mexicano o japonés sino artista, no puede negar que es hijo de dos grandes culturas.
A lo largo de su trayectoria ha incursionado en diversas formas de comunicación, es decir, obras plásticas. Ha sido muralista, pintor de caballete, ceramista, vitralista y escultor. Declarado admirador de José Clemente Orozco y Rembrandt, éste último le impresionó por su técnica; además considera que “cuando se pinta algo se pone en juego todo”.
La exhibición que se presenta en el teatro Javier Barros Sierra de la Facultad de Estudios Superiores Acatlán tiene especial cariño para él. Son una serie de dibujos en tinta de gran formato que elaboró entre 1970 y 1971. En estos diseños expresionistas el estudio del cuerpo humano es trascendental. Ofrecen la complejidad