ensayo vigilar y castigar de michel foucault
En este ensayo encontraremos como el castigo es una forma de pena que se impone a la persona que ha cometido un delito, una falta o que ha tenido un mal comportamiento. Veremos cuál es la manera que tiene el castigo para hacerse más severo, además de cuál sería el lugar adecuado para llevarse a cabo. Un ejemplo claro es como el que se relata en el libro, Vigilar y castigar de Michel Foucault, donde claramente podemos observar y analizar las formas de castigo que existieron en diferentes épocas, y como estas han ido evolucionando; con base a esto hemos planteado las siguientes interrogantes: ¿se considera al dolor corporal o físico, como el castigo más severo?, entonces se dice que, ¿realmente la prisión es un lugar donde se …ver más…
Entonces es así como, ¿realmente la prisión es un lugar donde se puede llevar a cabo un castigo como tal? Por supuesto que no, considerando lo anterior podemos decir eso, ya que si el mayor sufrimiento no está en lo corporal, entonces anula totalmente esa opción. Para Foucault (1976), menciona ‘la prisión no es lo suficientemente punitiva: los presos pasan menos hambre, menos frio, se encuentran menos privados, en resumen, que muchos pobres o incluso obreros’’ (p.25). Como podemos observar, el castigo como tal no se puede llevar a cabo en una prisión solamente, porque como se dijo anteriormente, el prisionero goza de muchos más privilegios que algunas personas que se encuentran fueran de la prisión, un ejemplo claro es el de cuando un prisionero acusado por violación, es llevado a prisión, y los demás reos violan a este individuo como castigo, en este caso el peor castigo no estaría en que se encuentre privado de su libertad, sino que, este individuo se quede con un trauma severo y con problemas emocionales.
Por lo tanto, ¿anteriormente el castigo era considerado como una sed de desquite del soberano, entonces ahora podemos decir que es un castigo del pueblo? Por supuesto que sí, ya que antes el castigo era efectuado por un verdugo, y este lo hacía con un cruel placer para castigar. Para Foucault (1976), menciona ‘el