Resumen: melville herskovits: el hombre y sus obras “la ciencia del hombre (1) y la realidad de la cultura (2)”
Respuesta: Cuando la palabra “apagar” es usada en la Escritura, está hablando de reprimir el fuego. Cuando los creyentes se ponen el escudo de la fe, como parte de la armadura de Dios (Efesios 6:16), ellos están reprimiendo el poder de los dardos de fuego de Satanás. Cristo describe el infierno como un lugar donde el fuego nunca se “apaga” (Mr. 9:44, 46, 48). De la misma manera, el Espíritu Santo es un fuego que mora en cada creyente. El quiere expresarse a Sí mismo en nuestras acciones y actitudes. Cuando los creyentes no permiten que el Espíritu sea visto en sus acciones, cuando hacemos lo que sabemos que está mal, entonces reprimimos o “apagamos” al Espíritu. No …ver más…
Así como a nosotros no nos gusta ser contristados, y así como tampoco buscamos reprimir lo que es bueno – así también no debemos contristar o apagar al Espíritu Santo al rehusar escuchar Su guía.
Cómo podríamos contristar el espíritu
5 ¿Cómo evitamos los cristianos causar tristeza al espíritu? “Andando” y “viviendo por espíritu”, pues de este modo no nos dejaremos vencer por los deseos carnales ni manifestaremos actitudes impropias (Gál. 5:16, 25, 26). Claro, la situación podría cambiar. Si empezáramos a desviarnos, aunque fuera de manera casi imperceptible, hacia conductas condenadas por la Palabra inspirada de Dios, entristeceríamos hasta cierto grado al espíritu.
6 Si nos acostumbráramos a pasar por alto la guía del espíritu santo, lo estaríamos contristando. O, lo que es lo mismo, estaríamos entristeciendo a Jehová, ya que él es la fuente de dicho espíritu. ¿Cómo debemos comportarnos a fin de no caer en este error? Un análisis de Efesios 4:25-32 nos dará la respuesta.
Cómo evitamos contristar el espíritu
7 Digamos siempre la verdad. En Efesios 4:25, Pablo escribió: “Ahora que han desechado la falsedad, hable verdad cada uno de ustedes con su prójimo, porque somos miembros que nos pertenecemos unos a otros”. En vista de que estamos muy unidos, como “miembros que nos pertenecemos unos a otros”, jamás debemos actuar de manera sinuosa, manipulando los hechos o tratando de conducir a nuestros hermanos a conclusiones erróneas, pues eso equivale a mentir.