Raimundo arón
VIDA DE UN CONSECUENTE:
UN AMIGO DE LA VERDAD
Raimundo Arón fue profesor de La Sorbona durante dieciocho años. Había dejado de serlo hacía cuatro meses cuando, a fines de la década del 60, los estudiantes de París iniciaron una revuelta que prendió la mecha de un movimiento que, aprovechado por los comunistas, puso a nueve millones de trabajadores franceses en huelga, paralizando el país y haciendo peligrar no sólo al Gobierno sino a toda la República.
Uno de los mayores opositores a esa revuelta estudiantil fue precisamente uno de los profesores de aquellos jóvenes: Raimundo Arón, quien la calificó de cosa de "chiquilines". Ya el haberlos tratado de "chiquilines" habría bastado para ser mirado torvamente por esos …ver más…
Ladridos como aquél no les molestaban a los "chiquilines": concordaban con las violentas estridencias de toda revolución. Pero aquellos jóvenes eran lo bastante lúcidos y sinceros como para reconocer que la razón estaba con Raimundo Arón, y que coincidiendo con Sartre sólo coincidían con algunas ideas de la moda Mao, por ejemplo, que les justificaba la pasión, pero los distanciaba de la razón. Con cínica honestidad, los jóvenes de Mayo declaraban: "Prefiero estar equivocado con Sartre a tener la razón con Arón".
Toda una escolástica confesión de sectarismo. Verdades contrarias a una doctrina socavan su solidez: hay que rechazarlas. Perjudican la consistencia de los idearios políticos, religiosos, económicos. Agrietan con dudas los compromisos. Arón se consideraba un "espectador comprometido". ¿Comprometido con qué? ¿Con una religión? Él era judío, pero no practicaba el judaísmo ("escribo como ciudadano francés y no como judío"). ¿Con un partido político? Si bien la derecha francesa se sintió muchas veces avalada por las opiniones de Arón, estimaba que "no se puede contar con él". ¿Comprometido con qué, con quién, entonces? Con la verdad. El más acertado retrato de Arón fue trazado por él mismo cuando, al serle preguntado qué valores apreciaba más, contestó: "Creo que lo más profundo de mi manera de ser y de pensar es el amor a la verdad y el horror a la mentira".
El amor a la verdad y el horror a la mentira lo llevaron a