“La historia de un migrante en mi familia”

Hola esta es otra historia real acerca de la migración que hay en México: tengo un tío que se fue a los estados unidos a minessota Minneapolis para ser más precisos se llama José Luis magos noriega y nació en el estado de Morelia Michoacán, México.
La razón por la que emigro a los Estados Unidos es que en la región donde vivía la vida para su familia era difícil. No le pagaban lo justo y lo que le pagaban después de trabajarles casi todo el día apenas les alcanzaba para medio comer, medio vivir con jornadas de trabajo extenuantes, sin casi poder ver a su familia, por eso decidió irse porque si aquí no los podía ver y con tampoco salario que no les alcanzaba ni para comer dijo que por lo …ver más…

Alrededor de las 9:30 ya al mirar que no regresó por mí tío, se desespero bastante y opto por salir y acercarse al río y así tratar de cruzarlo solo con la ayuda de Dios nuestro Señor.

Se animo y lo empezó a cruzar caminando. Pero al ir llegando poco más de la mitad, sintió que se hundía y se trago el agua; en ese momento lo primero que pensó es Dios Mío, voy a ahogarme. Nadie había en ese lugar. De pronto del lado americano, de Brownsville, entró una persona al Río, por un milagro de Dios, y logró sacarlo del agua. Gracias, Dios Mío, pensó mi tío, por ese gran milagro. ¡Qué maravilla de Dios recibí! En ese momento lloraba de la emoción.
Logro conseguir un rayd como dice mi tío o sea un aventón de una buena persona que sin cobrarle peso alguno, lo llevó a la ciudad de Raymondville, Texas, antes de la garita de migración. Desde ahí se dedico a caminar para lograr cruzarla, llevando un poco de comida y agua que la misma persona le había proporcionado.
No saben lo agradecido que esta con Dios por todas las maravillas que está haciendo con él. Pero, a los dos días de camino desgraciadamente ya no llevaba ni comida ni agua, y ni un rancho, nada alrededor. Ahí ocurrió otro milagro. Al ir caminando encontró una lata grande de frijoles, gracias a Dios; cuando ya casi estaba por vencerse. Dios le ayudó, dándole mucha paciencia para que no se desesperara. Así llego a esta ciudad de Minnesota Minneapolis.
Ahí en esa ciudad pues trabajaba de todo le estaba yendo muy