La obra comienza con una joven llama Sofía Amudsen apunto de cumplir los 15 años. Todo comienza cuando ella recibe unas cartas cuyo mensajes decían : ¿¿Quién eres??, ¿de dónde viene el mundo? ¿Qué es la filosofía?? Las pregunta causa un vuelco en el corazón de Sofía, quien pronto se da cuenta de lo difícil que resulta responder esas preguntas, lo curioso es que las cartas van dirigidas a otra persona una tal Hilde Moller una joven como ella, de su misma edad. Sofia decide no platicarle nada a su madre ya que el autor de las notas estará en contacto con ella.

comienza por donde empezaron los filósofos griegos 600 años antes de Cristo, por la discusión de los mitos y la búsqueda de las leyes de la Naturaleza. Los filósofos se fiaron de la …ver más…

Nadie se baña dos veces en el mismo río. Heráclito creía también que las contradicciones eran el equilibrio necesario de la vida. Los sentidos, y no la razón, era la base del pensamiento de Heráclito. Empédocles 494-434 a de C. opinaba que debiera de haber más de un solo elemento base o materia primaria. La tierra, el aire, el fuego y el agua eran los cuatro elementos que mezclados en distintas proporciones, producían todo el entorno,
Anaxágoras 500-428 a. de C. quién fue el primer filósofo de Atenas. Originario hablaba de minúsculas partículas que poseían la información de todo y que en su conjunto formaban la naturaleza como tal. Fue acusado de ateo por declarar que el sol no era un dios, sino una simple masa ardiente.
Sofia deduce, luego de leer sus manuscritos, que la filosofía no se aprende, más bien uno aprende a pensar filosóficamente.
Demócrito 460-370 a. de C. hablaba de partículas pequeñas o mejor dicho hablaba de la existencia de lo que hoy conocemos como átomos. no creía en la inmortalidad del alma, al igual que Heráclito, estaba convencido de que la naturaleza fluye y nada más.

El curso continuó con la sorpresa de que el maestro saluda a su alumna anunciándole su nombre: Alberto Knox, y su decisión de mandar a un mensajero seguroque depositará los sobres amarillos. Sofía descubre pronto al mensajero: un perro labrador de nombre Hermes que depositó sus cursos filosóficos en su mismísimo escondite.
Fue la Atenas de