Marco histórico del barroco
El siglo XVII es muy fastidioso en cuanto a arte se refiere. Durante este siglo gobernaron en España los Austrias menores, con quienes el país entra en progresiva decadencia. Al igual que en el siglo XVI, los monarcas delegan su poder en validos o favoritos, y en muchos aspectos hay una "medievalización" de la vida española.
Felipe III (1598-1621) hereda un gran imperio en bancarrota, pero también la enemistad con Inglaterra y los Países Bajos. El privado duque de Lerma traslada la Corte a Valladolid en 1600; seis años más tarde regresa a Madrid. Firma la paz con Inglaterra en 1604 y una tregua con los Países Bajos (1609-1621). Expulsa de la Península a los moriscos (1609), que generalmente trabajaban en el …ver más…
* Preocupación por el paso del tiempo * Pérdida de confianza en los ideales renacentistas
Ante la crisis barroca, los escritores españoles reaccionan de varias maneras: * Evadiéndose: Tratan de desentenderse de la realidad, y lo hacen cantando hazañas o viejas glorias del pasado, o bien presentan un mundo ideal en que los problemas se resuelven debidamente y triunfa el orden. Este es el caso del teatro de Lope de Vega y sus seguidores. Otros, sin embargo, prefieren refugiarse en el mundo del arte y de la mitología, como es el caso de Góngora. * Satirizando la realidad: Otro grupo de escritores opta por burlarse de la realidad, como Quevedo, Góngora en algunas ocasiones y la novela picaresca. * Con estoicismo: Exponen su queja sobre la vanidad del mundo, la fugacidad de la belleza y de la vida, la fama transitoria. El máximo exponente de esta actitud fue Calderón de la Barca en los autos sacramentales. * Moralizando: Critican los defectos o vicios proponiendo modelos de conducta acordes con la ideología política y religiosa de su época. Sus principales exponentes son la prosa narrativa y doctrinal de Gracián y Saavedra Fajardo.
Poetas del barroco
Luis de gongora
Nació en la antigua calle de Las Pavas (hoy Tomás Conde), en una casa propiedad de su tío Francisco de Góngora, racionero de la catedral, situada en el lugar que hoy ocupa el número 10 de la calle, aunque siguen existiendo dudas sobre estos datos. Era hijo del juez