La invención de américa: edmundo o'gorman
Sin lugar a dudas, las perforaciones del lóbulo son las más comunes. Actualmente, ni en los hombres son mal vistas como sucedía hace años. No hay dos orejas iguales, así que al momento de perforar no hay lugares específicos, todo es de acuerdo a la estética de cada persona.
El cartílago de la oreja y el tragus son perforaciones tradicionales que en la actualidad han ganado mucho terreno. Su historia se remota a cualquier época, país o tribu, ya que siempre han estado presente en la historia del hombre, principalmente con fines estéticos.
La perforación daith -inteligencia en hebreo- se coloca estéticamente en el cartílago justo arriba de la entrada al oído, sin embargo, no todas las personas tienen esta parte de piel en la oreja. El rook consiste en una o más perforaciones en la parte del cartílago situadas arriba y adentro de la concha de la oreja.
Al igual que el labio y la lengua, la ceja ha ganado mucha popularidad en los últimos años. Se recomienda utilizar, durante el tiempo de curación, argollas de calibre 16, ya que las más delgadas podrían ser rechazadas. Una vez cicatrizada la perforación, se pueden emplear broqueles, antes son incómodos para realizar la limpieza.
En los últimos años nada ha captado más la atención como la perforación en la lengua. Hoy en día es una de las más populares. Esta se emplea principalmente para estimulación sexual. Acude con