Informe De "A La Deriva" H Quiroga
A la deriva
H Quiroga
Podemos decir que el cuento "A la deriva" es un cuento realista porque podemos ver que las acciones que se relatan se pueden dar en la vida real. Tambien podemos señalar otras caracteristicas como por ejemplo el hecho de que el cuento se desarrolla en un ambiente familiar (en este caso la selva paragüaya). El autor trata de que la historia sea creible por eso el tiempo es lineal es decir los hechos siguen un orden cronologico.
Al principio de este cuento, Paulino (El personaje principal), pisa una serpiente venenosa (En este caso es una serpiente conocida como "serpiente de barba amarilla) que le da una mordedura en el pie. A causa de esto, inicia un viaje que termina por el río …ver más…
Este esfuerzo es igualmente vano ya que poco después, sobre "la honda ligadura del pañuelo, la carne desbordaba como una fea morcilla. Llegó por fin al rancho y se echó de brazos sobre la rueda de un trapiche. Los dos puntitos violeta desaparecían ahora en la monstruosa hinchazón del pie entero. La piel parecía adelgazada y a punto de ceder, de tensa. Quiso llamar a su mujer, y la voz se quebró en un ronco arrastre de garganta reseca. La sed lo devoraba..." Es entonces que Paulino decide que el mejor remedio es echar su canoa al río y emprender el largo viaje al pueblo vecino.
Poco después de llegar al medio del río, las manos le fallan y él se da cuenta de que necesita ayuda para llegar al pueblo. "...Consigue atracar la canoa cera de la casa de su compadre Alves y empieza a llamarlo..." Cuando Alves no responde, el lector se queda con la duda de por qué será. Sin embargo, podemos recordar que Paulino dijo que "...hacía mucho tiempo que estaban disgustados...".
Podemos concluir que esta capacidad esencialmente humana de enemistarse con los demás explica el fracaso de su esfuerzo.
Ya casi vencido, Paulino vuelve al río. El paisaje que rodea la canoa y a su pasajero deja la impresión de una belleza poderosa y eterna, como vemos en el siguiente pasaje: "...El Paraná corre allí en el fondo de una inmensa hoya, cuyas paredes, altas de cien metros, encajonan fúnebremente el río.